viernes, 26 de octubre de 2012

Internet, ropa y gastronomía, los nichos para abrir un negocio

El dólar prohibido y las tasas bajas son estímulos para iniciar un proyecto propio. Trámites, costos y oportunidades para emprender. Dónde pedir ayuda y dinero. Consejos y advertencias para no fallar.

Sin poder comprar dólares y con las tasas de interés por debajo de la inflación, muchos argentinos acumulan ahorros sin destino. Otros, acuciados por el aumento de los precios y las sombras de una economía menguante, necesitan hacer crecer sus ingresos. Bajo el influjo del empuje y la creatividad criollos, todos ellos explican por qué Argentina tiene una de las tasas de actividad emprendedora más altas del mundo. ¿Cuáles son los sectores y las claves para iniciar un negocio propio?

El especialista en finanzas personales Mariano Otálora dispara sin respirar: “por los bajos costos operativos, los negocios más fáciles de arrancar son aquellos relacionados con Internet (desde venta de servicios y productos , manejo y administración de redes sociales hasta producción de aplicaciones y software ), luego los que requieren baja inversión inicial y mucha rotación de stock, como un kiosco. Pero el negocio más fácil de encarar siempre corresponde a un producto o servicio que se conozca muy bien y con la menor cantidad de empleados posible. Ojo, también hay emprendedores que se pusieron en una plaza a venderles milanesas a los taxistas y facturaban 4.000 pesos, o que compran flores en el mercado mayorista para vender en el Día de la Madre.” Los analistas e inversores consultados por Clarín identificaron otros sectores en los que hoy la economía está ofreciendo oportunidades: delivery de productos alimenticios gourmet , servicios de gestoría especializados y servicios asociados con el turismo (guía, mapas, paseos en bici, tours personalizados, clases de tango). Otro de los rubros más populares para los creativos que empiezan es el de la producción y venta de ropa.

Trámites y planes
Antes de emprender, además de tener una buena idea hay que seleccionar la figura legal bajo la cual germinará. Para empezar, por sus bajos costos de constitución y mantenimiento, la mejor opción es una Sociedad de hecho. También es clave consultar a un contador para conocer la carga impositiva del negocio. Otro paso importante es registrar el nombre del emprendimiento como marca: el trámite se puede hacer en persona o a través de abogados especializados.

Un mojón fundamental en cualquier proyecto es la redacción de un plan de negocios , una de hoja de ruta que sirve para decidir inversiones, redefinir la idea original, obtener financiamiento y resolver si es necesaria la búsqueda de socios. ¿Para qué pueden servir? Para diversificar riesgos, complementar experiencias o para que aporten capital. Si se eligen socios, es importante establecer cuál será el rol de cada uno (atención con esto en los negocios familiares) y definir un plan que contemple todos los escenarios posibles, por ejemplo qué se hará si el negocio no funciona como se esperaba.

¿La idea es fabricar algún producto?
Cuidado con las trabas a las importaciones , que si bien ofrecen oportunidades para sustituir los productos que no ingresan al país también pueden complicar cualquier negocio hasta extinguirlo, por falta de insumos. Otro consejo es comprar equipos usados: la maquinaria insume una parte importante del desembolso en los proyectos industriales.

Vender por Internet
En 2011, diez millones de argentinos realizaron compras online, convirtiendo a la red en un gigantesco supermercado al cual acudir en busca de clientes. Para poder aprovecharlo vendiendo los productos o servicios propios, y si no se opera con los portales Más Oportunidades y Mercado Libre, se puede adoptar una plataforma de comercio electrónico como MercadoShops, que está integrada con el sistema de pagos MercadoPago. Ofrece un plan básico y gratuito y otro profesional, que cuesta 119 pesos mensuales. Tienda Nube da servicios similares a un costo de entre 79 y 249 pesos por mes. Estas plataformas sirven para que los compradores puedan pagar con tarjeta de crédito

Para abrir un comercio
Lo mejor es caminar la zona elegida y hablar con los vecinos para detectar sus necesidades, los comercios faltantes y el peso de la competencia. Si se va a alquilar hay que tener en cuenta los gastos de depósito (dos o tres meses), la comisión de la inmobiliaria y, si corresponde, el valor de la llave. Luego, se necesita dinero para acondicionar el lugar y comprar mercadería o insumos. Las habilitaciones pueden costar tiempo y dinero. ¿Una buena?

Los impuestos iniciales no son muy significativos
Otálora ofrece algunos números como guía: “el alquiler no debería superar el 12% de la facturación bruta, y en caso de tener empleados los costos laborales no deben superar el 30% de las ganancias brutas (lo ideal es entre un 18% y 23%). Hoy resulta difícil abrir un negocio a la calle con menos de 50.000 pesos”. Quienes ya tienen un negocio, pueden incrementar los ingresos sumando servicios con bajo costo y alto rendimiento, como alquilar una fotocopiadora, poner una máquina de café o una cabina telefónica. Un comercio debe esperar una utilidad neta de entre el 15% y 18%.

El taxi, un clásico de siempre
Un auto nuevo más una licencia y otros gastos cuestan unos 220.000 pesos. Si se tiene un usado, se puede bajar la inversión un 10%. Hay tres caminos para ganar dinero con un taxi: ser dueño y chofer –ingresos de entre 8.000 y 12.000 pesos mensuales–, contratar un chofer –hay que tener en cuenta la complejidad que implica tomar personal, para ganar entre 4.500 y 6.000 pesos– y cederlo a una mandataria que administre el coche y la licencia, con lo cual se pueden obtener entre 3.500 y 5.000 pesos mensuales.

Aprovechar una marca famosa
Otra opción: quienes tienen –o consiguen– más dinero que nuevas ideas pueden iniciar un negocio “llave en mano” si compran una franquicia, para abrir una sucursal de un comercio que ya existe. Desde 50.000 pesos se puede comenzar con una franquicia chica , pero el promedio se encuentra en los 150.000 pesos. Para mensurar el valor de estas cifras, los expertos en emprendedorismo estiman que el plazo razonable para recuperar la inversión en negocios chicos es de entre 12 y 18 meses; en los medianos entre 18 y 24, y en los más grandes las cuentas deberían equilibrarse después de los dos años.

“Argentina tuvo una coyuntura muy positiva para los emprendimientos entre 2003 y 2008. Luego se complicó un poco por la suba de los costos en dólares”, advierte Hugo Kantis, director del Programa de Desarrollo Emprendedor de la Universidad Nacional de General Sarmiento. Para sortear este obstáculo, el emprendedor “tiene que estar muy convencido de lo que ofrece, y vender esa confiabilidad en su producto para pedir plata: primero entre los conocidos y después en el mercado. A veces, es el futuro cliente quien pone un anticipo para que le hagan el producto que necesita”.

¿De dónde salen las ideas que podrían transformarse en negocios? “De la observación e interacción con colegas, parientes o usuarios de algún servicio. Hay que ver qué les pasa, qué necesitan, qué cosas creen poder mejorar”, sugiere Kantis. Y asegura que es clave hacerse amigo de otros empresarios jóvenes. Para contactarlos sirve ir a conferencias y cursos para emprendedores, aunque también pueden estar entre la familia y los amigos. Redes sociales como Facebook o LinkedIn son muy útiles.

La ebullición emprendedora argentina también causó un ranking de los errores más frecuentes: no evaluar correctamente si existe mercado para la idea, no destinar suficientes esfuerzos en difusión y marketing, equivocar la estructura de costos para poder vender a precios atractivos, no ser un buen conductor de equipos y descuidar a los proveedores.

Dónde pedir ayuda
Aunque muchas veces se sientan solos ante el mundo, los emprendedores tienen varios lugares a los que acudir. A través de varios programas, la secretaría PYME del gobierno nacional ofrece subsidios no reembolsables, créditos y asesoramiento a los nuevos emprendedores. El más atractivo es el PACC Emprendedores, que entrega hasta 110.000 pesos para gastar en máquinas, herramientas, muebles, materias primas o asistencia técnica a quienes hayan iniciado un proyecto hace menos de dos años. También se ofrecen créditos con tasas bonificadas, generosos reintegros fiscales por gastos de capacitación, financiamiento a emprendedores jóvenes mediante “préstamos de honor” de hasta 70.000 pesos que sólo se devuelven si el proyecto es exitoso, y capacitación gratuita para trazar planes de negocio.

Buenos Aires es una de las 10 ciudades del mundo con mayor actividad emprendedora . Según el Ministerio de Trabajo nacional, el año pasado en la Capital se crearon 11.416 empresas. Pero atención: también bajaron sus cortinas otras 10.598. La magnitud proporcional de la pérdida fue de 92,8%. En 2010 la ecuación fue de 89,7%, y en 2009 de 96,9%. Es decir que, en promedio, sólo sobrevive una de cada diez empresas abiertas.

En diciembre pasado se aprobó la Ley del Emprendedor porteño, que busca aumentar el número de empresas nuevas en la Ciudad, bajar la tasa de mortalidad de los nuevos emprendimientos y contribuir a regularizar la situación laboral, tributaria y las habilitaciones de las nuevas pymes. Para alcanzar esas metas, el gobierno porteño tiene hoy varios programas de apoyo, como Desarrollo Emprendedor (ofrece asistencia para analizar la viabilidad de la idea y diseñar el Plan de Negocio, y otorga premios en dinero y capacitación) y Buenos Aires Emprende (distribuye aportes no reembolsables de hasta 70.000 pesos y capacitación por un año para nuevos emprendedores y empresas de hasta 24 meses). Otra pata clave de la asistencia es la incubación : en un predio de mil metros cuadrados, los proyectos tecnológicos o de diseño seleccionados pueden instalarse durante un año y convivir entre sí. Un dato: si las empresas o start up no consideran la incubación, en dos años sólo queda en pie un 30%. En cambio, si se capacitan en gestión y reciben asesoramiento la supervivencia llega a 60%.

“Muchos jóvenes se vuelcan a la moda, el diseño, la producción audiovisual, la música o la industria editorial e impulsan sus propios emprendimientos, y nosotros los apoyamos para que puedan armar un plan de negocios sustentable”, explica Enrique Avogadro, director de Industrias Creativas y del Centro Metropolitano de Diseño (CMD) porteño. “Las industrias creativas tienen una barrera de entrada bastante baja, ya que se sostienen sobre todo con el conocimiento: contamos con emprendimientos que empezaron con un capital de 15.000 pesos ”.

Muchas organizaciones civiles también tienen programas de apoyo a quienes inician un negocio. INICIA es una comunidad de emprendedores con más de 10.000 asociados que arrancó como consecuencia de la crisis del 2001. “Se nos acercan todo tipo de emprendedores; desde aquellos que todavía no comenzaron sus actividades hasta los que tienen negocios bien establecidos. Tenemos seminarios de capacitación, programas especiales para cada etapa del negocio, asesoramiento y actividades de fortalecimiento de redes”, explica su presidente Joaquín Sorondo. INICIA –una red que por ahora funciona en Capital, GBA, Tucumán y Rosario y en la que trabajan 300 voluntarios provenientes en su mayoría del sector empresario– entrega un premio anual que otorga un año de asesoramiento y un viaje de negocios a Barcelona.

Otras entidades que patrocinan a los emprendedores son la Escuela Argentina de Negocios, las universidades Tecnológica Nacional, Abierta Interamericana y San Andrés; el ITBA, el CEMA, el Instituto de Emprendimientos Científicos y Tecnológicos (IECyT), Emprear y Endeavour.

Bullen ideas, sobra talento y hay buenos apoyos. ¿Qué más hace falta? Para Julián Drault, director de la firma de email marketing emBlue, “tenemos un potencial gigante si logramos nuclear los ahorros de muchas personas que no saben qué hacer con sus pesos y dárselos a emprendedores pujantes”. Entonces volvemos al principio.

Claudio Savoia
Diario Clarín / Zona


jueves, 13 de septiembre de 2012

Servicios para viajeros 2.0




Hay una nueva generación de turistas que buscan algo más que la foto típica y un buen paisaje: quieren conocer la cultura y el idioma; alojarse y comer en casas de familia y recorrer la ciudad pedaleando. Para cubrir esta demanda, surgen innovadores negocios.

Después de mucho viajar por el mundo y el país, Eugenia Márquez decidió convertir su hobby en negocio y creó Chee Argentina, un emprendimiento de turismo no convencional que difunde la cultura autóctona desde lo cotidiano. “La idea es mostrar al turista cómo vivimos los argentinos y los porteños, y que participe”, dice Marquez. Hacer un asado, ensayar pasos de tango en el living de una casa, o visitar La Boca más allá de Caminito, son experiencias que muchos viajeros buscan. 

Antes de dedicarse al turismo Eugenia trabajó en compañías de seguros y financieras, luego tuvo un emprendimiento agropecuario. “Empecé a plantear este negocio en 2010, informándome y haciendo un estudio de mercado. En 2011 me inscribí en el programa Buenos Aires Emprende (de la subsecretaría de Desarrollo Económico porteña) y armé el business plan”, cuenta. “Invertí $ 40 mil en la página web y folletería, en los que ofrecía paquetes de experiencias, pero tuve que tcambiar la comunicación porque no llegaba el viajero que estaba buscando”, dice Eugenia. “

Me consultaban por tours clásicos, shows de tango y viajes a Cataratas, cuando yo no ofrezco eso ni puedo competir con las agencias de turismo masivo”, admite. Así, con la ayuda de tutores de Buenos Aires Emprende, reformuló su plan de negocios y de comunicación. “Invertí $ 20 mil más en cambios en la página web y nueva folletería, y obtuve un aporte no reembolsable (ANR) por otros $ 43 mil”, resume. 

De a poco, Eugenia comenzó a tejer alianzas con otros emprendedores: guías especializados en arte y cultura, profesores de tango, artesanos que abren su taller a las visitas, y agencias de viajes que le derivan pasajeros. “No apuntamos al turista espectador que va de compras, sino a un viajero que quiere aprender y participar”, afirma. “La Argentina tiene mucho para mostrar y mí idea es expandir el proyecto a todo el país”, cierra.

Por amor a Buenos Aires
Karine Manoli es canadiense - de Montreal, Quebec-, y llegó a Buenos Aires, en 1990, para colaborar por un año con una ONG en educación popular. Por entonces, tenía 22 años y quedó prendada con la ciudad, sus luces, su ritmo y las flores de jacarandá. Se fue para terminar su carrera universitaria en Letras, y cuatro años más tarde volvió para instalarse. Aquí, enseñó idomas y trabajó para una oficina de promoción de inmigrantes del cono Sur hacia Quebec.

 Entre 2003 y 2006, armó un hostal para extranjeros en la casa que alquilaba. “Había mucho turismo internacional y pocos hostels en la ciudad. Yo tenía dos habitaciones disponibles y me pedían más”, cuenta. Finalmente, en 2007, cuando la oficina de Quebec se trasladó a Brasil, Valerie, una cordobesa ex compañera de trabajo, le propuso armar un emprendimiento en turismo.

“No teníamos capital ni inversores para montar un establecimiento propio. Entonces, decidimos concentrar servicios que ofrecían otras personas, como cuartos de alquiler, clases de Español o tours especializados en arquitectura, fotografía o historia”, dice Karine.

La primera inversión fue de $ 5.000 (en 2009) para la página web. Las socias se inspiraron en el color del Jacarandá, y pensaron crear una sección “de yapa” con datos útiles para los turistas. Así surgió el personaje que le dio el nombre al emprendimiento: "Violeta Deyapa: una chica de 30 y pico, canchera, con onda, que sale y está al tanto de lo que pasa en la ciudad”, dice Karine.

El año pasado, participaron del programa Desarrollo Emprendedor del Gobierno porteño y en el concurso Naves del IAE, la escuela de negocios de la Universidad Austral. Con una inversión de $ 78 mil, (40% financiado a través de un ANR), rediseñaron el sitio para hacerla interactiva y mejorar su posicionamiento en buscadores.

Hoy, facturan unos $ 45 mil mensuales, aunque el margen de ganancia es pequeño, ya que casi todos los servicios (excepto algunos tours armados a medida) están tercerizados. “Apuntamos a gente que sabe viajar y busca una experiencia diferente. Queremos expandirnos a otros lugares del país y a la región. Estamos contactando a emprendedores en Chile y Uruguay”, adelanta Karine.

Mejor pedaleando
Uno de los primeros trabajos de Gabriel Gasparrou fue repartir volantes de un show de tango en La Boca. Así conoció a Nicolás Falcioni, socio de Urban Bikin, un emprendimiento de tours en bicicleta, a quien le compró el negocio en 2003. Pagó unos $ 14.000 por la marca, 10 bicicletas y algunos clientes. A partir de ahí, armó una SRL y renovó la flota de bicis, optando por Bambucicletas, que son más livianas, ecológicas y se producen con mano de obra local.

“Decidí enfocarme en el turismo responsable, que busca el menor impacto ambiental posible y pagar un precio justo”, cuenta Gabriel. “Por eso, estamos certificando ISO 9001”. El emprendedor obtuvo en 2011 un ANR de $ 58 mil, con el que se trasladó de su casa a un local a la calle y renovó parte del equipamiento y las bicis.

La compañía ofrece paseos armados, según los intereses de cada grupo, y también el alquiler de bicicletas. Y si bien la afluencia de turistas extranjeros a Buenos Aires bajó el último año, el negocio no paró de crecer. La estacionalidad (en los meses de frío se trabaja poco) es una debilidad de este emprendimiento. Sin embargo, “en un contexto donde las ciudades están saturadas del tránsito, la bici es como una alternativa rápida, económica y entretenida de hacer turismo”, dice Gabriel.

Español para extranjeros
El instituto Join Us empezó, en 1991, como escuela de inglés para chicos y adultos. Con el boom del turismo internacional en Buenos Aires posterior a la crisis de 2001, se abrió la posibilidad de enseñar español para extranjeros. “Empezaron a venir no sólo turistas, sino también estudiantes universitarios y de posgrado”, cuenta Andrea Carricaburu, socia del instituto.

“A través de un conocido que alojaba en su casa a estudiantes noruegos, empezamos a dar clases de español por la mañana, a contraturno de las clases de inglés”, recuerda Andrea. “Nos contactaron con una escuela de idiomas de Oslo, y así generamos una alianza con otros institutos europeos. Como, en general, los estudiantes necesitan alojamiento y quieren hacer paseos, nos asociarnos con casas de familia, guías y otros emprendedores, para ofrecer paquetes completos”, cuenta.

Este modelo de negocios funcionó muy bien hasta 2008, cuando la crisis financiera retrajo el turismo desde Europa y los Estados Unidos. “A partir de allí, cambió el perfil de los viajeros. Hoy llegan más desde países de la región, y creció la afluencia de estudiantes brasileños que buscan clases de español, e incluso de englés”, apunta. En general, son estudiantes secundarios y vienen en grupo.

“Les ofrecemos alojamiento en casas de familia para hacer una inmersión en el idioma, y también mucho shopping y entretenimiento”, dice Andrea. Su instituto es parte de la Red de Turismo de Idiomas por la cual generó convenios con instituciones en Mendoza, Salta y Bariloche para ofrecer a los estudiantes continuar el curso mientras recorren el país.

A pesar de que los contingentes estudiantiles brasileños crecen, aún no compensa la baja del turismo norteamericano y europeo. “En el mejor momento, los estudiantes de español extranjeros eran el 30% de la matrícula, hoy son el 10% y no hemos ajustado el valor de las clases en dólares”, señala. “Hoy, no creo que sea negocio tener una escuela de español para extranjeros, pero sí es un buen complemento para una escuela de idiomas", concluye.

María Gabriela Ensinck
El Cronista
Imagen: El Cronista

martes, 21 de agosto de 2012

Siete razones por las que los negocios no perduran



Esto es normal porque no es fácil levantar un negocio de la noche a la mañana. Se requiere gran esfuerzo y enorme dedicación, el empresario que se inicia tiene que entender que sus primeros años de actividades son una forma de ganar experiencia, y que no existe actividad que no tenga riesgo e incertidumbre.

Algunas razones que llevan a que los nuevos negocios no perduren:

1. Falta de experiencia: 
Conocer a la perfección la actividad comercial que se pretende desarrollar es indispensable. Antes de invertir en ella deben empaparse de todos los aspectos de la misma.

2. No se tiene una estrategia de marketing: 
Producir algo o tener un inventario para la venta es una parte del negocio. La más importante es tener una estrategia y tácticas muy bien definida de la forma de llegar al mercado.

3. Optimismo exagerado: 
Todo nueva empresa debe investigar el mercado al que pretenden ingresar, estudiar los competidores y hacer anticipadamente predicciones y objetivos de sus ventas.

4. Tiempo de preparación:
Antes de comenzar a recibir el dinero de los clientes se requiere completar muchas actividades. Este periodo que antecede a la operación de una empresa debe estar muy bien calculado.

5. Capital de trabajo: 
Los requerimientos de capital de trabajo deben hacerse por medio de un presupuesto. Un pronóstico bien preparado del flujo de efectivo ayuda a decidir cuánto y cuándo se necesitará.

6. Las consecuencias de un crecimiento temprano: 
Un negocio cambia con mucha rapidez de forma y de tamaño en sus comienzos. A medida que aumentan las ventas, se necesitan sumas de dinero cada vez más grandes para alimentar ese crecimiento.

7. Una ubicación errónea: 
El punto en donde se ubica el negocio y el alquiler que paga son un aspecto vital.

Fuente: Latinpyme

miércoles, 18 de julio de 2012

Estimulando tu espíritu emprendedor…



¿Nunca les pasó que de tener una idea en la cabeza y no saber como expresarla? A mi me sucede a menudo, especialmente cuando me siento a escribir esta columna.

Acumulo y anoto ideas para compartir pero al momento de bajarlas al teclado se me dificulta.

Para esta editorial estuve toda la semana pensando en temas que estimulen, impulsen, renueven el espíritu emprendedor. Me senté frente a la computadora y no encontraba ninguna forma atractiva de contarlos…. hasta que encontré que alguien escribió antes algo parecido y mucho mejor de lo que yo podría hacerlo.

Esa persona es el empresario e inversor español Alejandro Suárez Sánchez Ocaña que escribió un artículo llamado “10 ideas para estimular tu espíritu emprendedor” y me tomo el atrevimiento de compartirlo:

1. Cree en ti mismo
Es de Perogrullo, pero resulta fundamental: una persona sin autoconfianza no puede desarrollarse como emprendedora. Toda actividad que deba partir de ti empieza dentro de ti mismo.

2. Desarrolla un espíritu crítico, empezando por ti mismo
La apatía y el conformismo con uno mismo y con lo establecido son dos de los principales enemigos del emprendimiento.

3. Ambiciona objetivos, valora periódicamente si tus acciones te están acercando o alejando de ellos
Cualquier objetivo que te propongas y te motive lo suficiente es válido, plenamente válido. Visiónalos y acércate cada día más a ellos.

4. Que tus ambiciones sean reales y lógicas
 Puede ser muy grandilocuente querer conquistar el mundo o abolir el hambre en África, pero sé razonable con tu micro mundo. Si lo que te motiva a corto plazo es comprarte una pantalla de plasma para ver la Eurocopa, trabaja por ello. Está bien tener grandes motivaciones con mayúsculas, pero también pequeños objetivos a corto plazo. Son estos últimos los que te harán moverte en el día a día y mejorar de forma tangible.

5. Desarrolla tus cualidades creativas
El mayor enemigo de la creatividad es uno mismo y sus “certezas de que no es creativo”. Todos podemos ser creativos en mayor o menor medida. Picasso decía que solo hay que fijarse en los niños. Todos ellos son personas creativas. A medida que nos vamos haciendo mayores, la gran mayoría de nosotros -por vergüenza, miedo o asemejarnos a la masa- va perdiendo esa creatividad. Recupera e incentiva la tuya.

6. Sé rápido
Es importante. No hay que ser un kamikaze, pero sí lo razonablemente rápidos en nuestras iniciativas. Si bien es cierto que algunas personas, por llegar demasiado rápido, se adelantan a su tiempo y pueden resultar incomprendidas, no es menos cierto que el mundo está lleno de personas que creyeron tener una idea y que, de tanto amasarla en su mente, vieron cómo fueron otras las que la pusieron en marcha.

7. Elije ser piloto
Las personas se pueden dividir en dos grupos: los que pilotan su existencia y los que se dejan flotar y acompañan a la gran masa según sople el viento. El éxito personal y profesional del segundo gran grupo está generalmente muy encorsetado, o se debe al azar. Es importante pilotar tu propio destino. Toma tus propias decisiones, aunque te separen del camino de las personas más cercanas.

8. Valora a los demás de la misma forma en la que te gustaría ser valorado
La “meritocracia” es el ecosistema lógico más beneficioso para cualquier persona con espíritu emprendedor. Siguiendo la misma regla de tres, para ser tratado así, deberías valorar del mismo modo a los de que tienes alrededor, esto es, en relación a sus méritos adquiridos.

9. No digo que olvides la teoría, pero… 
Para un emprendedor, hasta metiendo la pata, la clave está en la práctica. En el ecosistema emprendedor hay personas que leen todos los libros, acuden a todos los actos, leen todas las revistas y están dando vueltas al mismo círculo una y otra vez. Sin embargo, dan la sensación de que nunca lograrán hacer nada o, peor aún, que lo harán cuando sea demasiado tarde.

10. Sé práctico
Dentro de la analítica del cerebro izquierdo debería estar grabado a sangre y fuego que nuestro esfuerzo debe tener siempre una recompensa y un motivo.  El emprendedor se esfuerza y es creativo, pero todo ello debe estar marcado por un alto carácter práctico que le haga vislumbrar un objetivo que le mantenga motivado. Generalmente lo más rápido es lo más sencillo, y lo más sencillo es ser práctico.

Marcelo Berenstein 
Periodista - Director de Emprendedores.News
Autor del libro “201 Mensajes para Emprender y Liderar”
Conferencista internacional sobre entrepreneurship, liderazgo y motivación

Imagen: Web

sábado, 30 de junio de 2012

Emprendimientos rurales, un negocio que mejora la calidad de vida


      Los dos vagones

Para complementar actividades agropecuarias, rescatar pueblos del olvido o para cumplir el sueño de irse a vivir al campo, los emprendimientos rurales ganan terreno. En el país hay unos 1.600 establecimientos agropecuarios que ofrecen actividades turísticas, gastronómicas y deportivas, que suman a pueblos rurales.

Hace 10 años, mientras trabajaba en la gerencia de un laboratorio farmacéutico, Miriam Gattari adquirió un campo de 27 hectáreas en Bartolomé Bavio, municipio de Magdalena. Y, lo que se presentó como una oportunidad de negocio, se transformó en una elección de vida ya que al poco tiempo, dejó la ciudad y se trasladó a vivir allí.

El predio tenía originalmente más de 100 hectáreas que pertenecían a Juan Manuel de Rosas. Con el paso del tiempo, fue cambiando de manos y sufrió sucesivas divisiones, hasta quedar 27 hectáreas destinadas a un tambo. Cuando Gattari lo adquirió, recicló el galpón y dos vagones que le dan nombre a la estancia, como salón de usos múltiples y dormitorios para turistas. Los Dos Vagones, a 100 km de la ciudad de Buenos Aires y 50 de La Plata, también ofrece comodidades para pasar el día y realizar eventos empresarios. 

"Adquirí el campo por u$s 27.000, pero llevo invertidos diez veces más", asegura Gattari. "Lo importante es que ahora vivo como me gusta, rodeada de animales de granja, mascotas y lejos del estrés", afirma la ex ejecutiva. 

Proyecto Ecohostel Rewe

A Angel Dovico, ingeniero en Alimentos, le pasó algo similar. Hace cuatro años, visitó por primera vez la zona de Lago Moquehue, en Neuquén, y "fue amor a primera vista", describe. "Surgió la posibilidad de comprar un terreno y con mi familia no lo pensamos dos veces; nos trasladamos allí", cuenta. 

Comenzaron por construir una cabaña a orillas del río Quillahue, y la alquilaron a turistas. Al ver la gran demanda y fascinación que provocaba el lugar en los visitantes, decidieron encarar un proyecto más ambicioso: la construcción de un ecohostel. Para esto, Dovico se inscribió en el posgrado de turismo rural de la Facultad de Agronomía de la UBA. Allí conoció a su socio, el ingeniero agrónomo Daniel Farris, y juntos decidieron lanzar un fideicomiso abierto para llevar adelante el desarrollo inmobiliario. 

El ecohostel Rewe contará con un total de 30 plazas y se ofrecerán actividades al aire libre como trekking, cabalgatas, mountain bike, avistaje de aves, escalada, pesca con mosca y paseos en gomón por el lago, entre otras. La inversión inicial en el fideicomiso es de u$s 288.500, con una tasa de corte del 15% y un recupero de la inversión a tres años. La ventaja de este sistema es que no tributa el 35% del impuesto a las ganancias.

Sector pujante
Actualmente existen en el país cerca de 1.600 emprendimientos de turismo rural, de acuerdo a datos de la Cátedra de Turismo Rural de la Facultad de Agronomía de la UBA. "La Argentina es pionera en esta actividad en América latina, con el primer registro de un establecimiento agropecuario destinado al turismo que data de 1973", cuenta Mariano Villani, coordinador de la cátedra. 

En el año 2000, la entonces Secretaría de Agricultura de la Nación creó el Programa Argentino de Turismo Rural y, desde 2008, junto al INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) y el Ministerio de Turismo, se puso en marcha el Proyecto Nacional Turismo Rural (Pronatur), el ente especializado que apoya a los emprendedores del sector. 

El país cuenta, además, con una amplia red de asociaciones, como la Red Argentina de Turismo Rural (Ratur), que agrupa a más de 100 productores, y el programa Cambio Rural impulsado por el INTA y el Ministerio de Agricultura, que reúne a 106 productores. La cantidad de establecimientos que ofrecen actividades gastronómicas y de turismo fue creciendo de 461 registrados en 2000, hasta los más de 1.000 actuales. 

Se trata de un negocio atractivo para los productores agropecuarios ya que "se puede complementar con las actividades productivas y no requiere grandes inversiones adicionales, dado que se sustenta en la utilización de recursos ociosos disponibles en el establecimiento", destaca Villani. 
Uno de los beneficios indirectos del desarrollo del turismo rural es la generación de oportunidades laborales para grupos vulnerables. 

Actualmente, la mayoría de los emprendimientos son dirigidos por mujeres y con colaboración directa de jóvenes que, de otro modo, deberían emigrar a los centros urbanos.  La venta directa de productos agropecuarios a los turistas también es una oportunidad de negocio para los emprendedores rurales, ya que evitan intermediaciones y perciben una ganancia directa.

Emprender con la naturaleza
Hace más de 20 años, Gustavo González, amante del ciclismo y las salidas al aire libre, decidió convertir su hobby en modo de vida. "Empezamos un grupo de amigos que nos juntábamos a hacer trekking y bike treck, con las primeras bicis todo terreno que llegaron al país", cuenta. "Se empezó a sumar gente y decidimos cobrar por el tour, para así financiarnos los viajes. 

Con el tiempo, el grupo se dividió entre los que queríamos profesionalizarnos para vivir de esto y los que sólo buscaban viajar gratis", confiesa. Así nació a principios de los '90, Bike Trekk, una de las primeras agencias especializada en turismo de aventura. "Invertimos unos u$s 600 de entonces, en habilitaciones, folletería y el alquiler de una oficina en la zona de Tribunales", recuerda el emprendedor.

Un importante impulso a este incipiente negocio llegó de la mano del programa de cable Biciclub, con cuya producción se asociaron para filmar los recorridos. Así, cada domingo iban sumando más fanáticos del pedal a las salidas. Finalmente, el programa dejó de emitirse, pero González ya contaba con una masa crítica de clientes. 

La mayoría de los recorridos son cortos (hasta 100 km) y se hacen en el día, pasando por caminos rurales, pueblos y estancias. También se hacen salidas "especiales", de varios días, como un recorrido por los Esteros del Iberá, la ruta de la Yerba Mate en Corrientes y Misiones, o el Parque Nacional Talampaya en La Rioja. Las salidas cortas tienen un costo de entre $ 100 y $ 150, dependiendo de si el participante lleva la bici en su propio vehículo hasta el punto de partida. 

El propio González se encarga de trazar los recorridos y oficiar de guía en cada salida, junto a su esposa que se ocupa de la administración del emprendimiento. "Tratamos de profesionalizar nuestro servicio, pero en un punto queremos mantenerlo como un emprendimiento familiar, en el que nosotros mismos salimos con la gente a pedalear, porque eso es lo que nos gusta", dice el emprendedor. 

En 2008, González realizó el curso de posgrado en Turismo Rural en la facultad de Agronomía de la UBA, "donde encontré varias herramientas para mejorar el servicio y, también, me contacté con otros emprendedores, con los que hacemos algunas alianzas. Por ejemplo, incluimos sus estancias en nuestro recorrido y ellos nos brindan servicios de gastronomía y refrigerios"

En su búsqueda de capacitación, González realizó el año pasado un taller sobre publicidad en redes sociales. "Me había metido en Facebook porque la gente me decía que tenía que estar ahí, pero no sabía qué poner ni cómo manejarme. El curso me enseñó a usar este espacio como canal de comunicación con los clientes y sus amigos. 

El boca a boca, ya sea virtual o real, es fundamental en este negocio. Porque un cliente satisfecho te trae a dos más, y un cliente enojado te espanta a por lo menos diez", sentencia. 

Para este año, González tiene previsto renovar su parque de bicicletas para alquilar y el minibus con trailer para el traslado, todo con fondos propios.

María Gabriela Ensinck
Diario El Cronista (Argentina)
Fotos: Web

jueves, 21 de junio de 2012

Cómo realizar llamadas telefónicas efectivas


Es importante considerar que antes de realizar alguna acción de comunicación, debemos siempre, como primer paso, definir cuáles son nuestros objetivos y cuál es la razón de ser de nuestra comunicación.
Previamente les conté Cómo redactar mensajes efectivos, en esta oportunidad es el turno de las llamadas telefónicas.
Aún cuando parece ser muy sencillo, conoceremos algunos tips para realizar llamadas telefónicas efectivas. Será necesario que consideremos tres instancias y sigamos estos consejos.
Antes:
Definir el o los objetivos que motivan nuestra comunicación. Debo tener muy claro: ¿qué quiero lograr al finalizar esta llamada?
Reunir y tener a disposición toda la información necesaria relacionada al tema que trataré durante mi llamada. Pueden ser datos, informes, estadísticas, documentos, mails y otros.

Durante:
En esta instancia deberemos prestar especial atención a esta estructura:
Saludo. Buen día / Buenas tardes / Hola.

Asegurarme que la persona con quien estoy hablando esté disponible para recibir mi llamada y focalizar su atención en la conversación. Podremos utilizar preguntas como: “¿Disponés de un momento para darme algunas respuestas? / ¿Es un momento oportuno para conversar? / ¿Podemos conversar unos minutos? De esta forma obtendremos una mejor predisposición de nuestro interlocutor o sabremos si debemos volver a llamar en otro momento.
Exponer el motivo de nuestra llamada. Como lo definimos previamente, será muy sencillo resumirlo en una oración. Podremos utilizar frases como:

“Te llamo por [tema] / El motivo de mi llamado es [objetivo]”.
Definir mis expectativas, debo asegurarme de hacerlas explícitas. Por ejemplo:
 “Quisiera recibir tu opinión sobre [tema] / Necesito una respuesta sobre [tema] / Enviame la documentación acerca de [tema]”.

En esta instancia sabremos si nuestra comunicación será efectiva o podrá verse obstaculizada por diversos motivos. A considerar:
  • Interlocutor no apropiado.
  • Desconocimiento del tema que estamos planteando por parte de nuestro interlocutor.
  • Información no disponible en ese momento.
  • Negación de una respuesta.
  • Necesidad de análisis antes de dar una respuesta.
Otros motivos.
En todos los casos deberemos indagar con la técnica de las 5W+1H cómo continuar. Por ejemplo:
  • Si la información no está disponible → consultar nueva fecha de consulta.
  • Si la persona no está disponible → recoordinar llamado.
  • Si el tema que planteamos necesita análisis → indagar motivos, consultar si necesita más información o cómo podemos colaborar para agilizar ese análisis.
Por otro lado, podremos encontrarnos con diversas interferencias que no permitirán que nuestra conversación sea apropiada, algunas de ellas:
  • Ambiente demasiado ruidoso
  • Problemas con la tecnología: baja señal, transmisión entrecortada, ecos, delay, otros.
  • Distracciones externas
  • Tono, ritmo o volumen de voz inapropiados
Si las situaciones planteadas previamente son superadas o no se plantean y continuamos en el desarrollo de nuestra conversación, deberemos considerar un paso muy importante:
  •  Verificar que entendimos correctamente la información que recibimos.
  • Asegurarnos de haber cumplido nuestros objetivos.
  • Agradecer a nuestro interlocutor por su tiempo y respuestas.
Por último, como tercera instancia tendremos en cuenta el después de nuestra conversación.
Después
Confirmar por escrito la información recibida telefónicamente, plasmar las decisiones tomadas, contar con un registro escrito de la conversación.

Ejemplo de mail para enviar luego de realizar una llamada.

Hola [Nombre],
De acuerdo a lo conversado telefónicamente y para estar seguros de haber comprendido correctamente la información recibida, te envío un resumen.
  • Motivo de la llamada: [tema / objetivos].
  • Respuestas recibidas: [detallar de acuerdo a conversación].
Opción A: cumplimos nuestros objetivos y el tema se agotó con la conversación.
Escribime en el caso de ser necesario modificar algún punto.
Opción B: nuestros objetivos no fueron cumplidos y debemos realizar un seguimiento sobre el tema.
A continuación deberemos [detallar pasos a seguir, tiempos de espera, solicitud de más información].
Gracias y saludos,
[Firma]
A modo de resumen, aquí tienen disponible un punteo para imprimir y tener como ayuda memoria cerca de nuestro teléfono.
ESTRUCTURA DE LLAMADAS TELEFÓNICAS
Antes
  • Definir objetivos de mi llamada.
  • Contar con la información necesaria relacionada al tema a tratar.
Durante
  • Saludo.
  • Asegurarme la disponibilidad.
  • Exponer el motivo de nuestra llamada.
  • Definir mis expectativas de manera explícita.
  • Verificar la comprensión de la información recibida.
  • Asegurarnos de haber cumplido nuestros objetivos.
  • Agradecer.
Después
  • Enviar mail con resumen de la conversación.
  • Realizar el seguimiento del tema tratado.

 Fuente: networked blogs

miércoles, 6 de junio de 2012

20 frases emprendedoras


  • “Quien le teme al fracaso, también le teme al éxito” (Anónimo)
  • “Sólo una cosa convierte en imposible un sueño: el miedo a fracasar” (Paulo Coehlo)
  • "El único lugar en el que éxito viene antes que trabajo es en el diccionario" (Vidal Sassoon)
  • "El fracaso derrota a los perdedores, e inspira a los ganadores" (Robert Kiyosaki)
  • “Cuando nuestras actitudes sobrepasen nuestras habilidades, aun lo imposible se hace posible” (Anónimo)
  • “El éxito es como un tren, todos los días pasa pero si no te subes tú, se subirá otro” (Anónimo)
  • “Si pierdes de vista tus sueños, no se podrán hacer realidad” (Anónimo)
  • "El éxito no es el final, el fracaso no es la ruina, el coraje de continuar es lo que cuenta" (Winston Churchill)
  • “La emoción de ganar debe ser mayor al miedo de perder” (Robert Kiyosaki)
  • “Donde hay una empresa de éxito, alguien tomó alguna vez una decisión valiente” (Peter Drucker)
  • "Hay tres cosas en la vida que no se puede perder: la esperanza, la paciencia y la honestidad" (Anónimo)
  •  “La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que hacer, alguien a quien amar y algo que esperar” (Tomas Chalmers)
  • "Las metas son sueños con fecha de vencimiento" (Anónimo)
  • "El optimista tiene siempre un proyecto, el pesimista una excusa" (Anónimo)
  • "Es posible cambiar las estrellas" (Edwin Van den Broeck)
  • “Un líder es aquel que ejerce su poder con autoridad y responsabilidad, el que busca el bien del grupo, no el individual” (Anónimo)
  • “Dos palabras definen el éxito para un entrepreneur: persistencia 80% e innovación 20%” (Anónimo)
  • "Ningún hombre está vencido, mientras no se venza en su propia mente" (Anónimo)
  •  “La zona de confort es la zona de los que sólo observan y aplauden, no la de los ganadores” (Anónimo)
  • “El éxito no se logra sólo con cualidades especiales. Es sobre todo un trabajo de constancia, de método y de organización" (J.P. Sergent)

Fuente: soy entrepreneur