lunes, 27 de diciembre de 2010

¿Cuál es el momento para iniciar mi propio emprendimiento?


Dicen que el momento de “dar el salto a la independencia” viene desde el corazón, se da cuando aparece una oportunidad, hay quienes afirman que cuando llega el momento es imposible hacer oídos sordos, en fin, cada cual tiene su propia teoría sobre cual es el momento indicado para aventurarse a emprender.

Muchos tenemos esa idea de iniciar nuestro propio negocio, formar una empresa o ser independientes. Este, es un tema recurrente en las reuniones entre estudiantes de económicas, muchas veces empieza con un “algo tenemos que hacer!” y se pierden tardes y noches evaluando posibilidades, charlando, tirando ideas, pero la verdad es que es muy difícil decidirse a empezar, hay que saber encontrar el momento, tenerse confianza, estar listo para enfrentar desafíos diarios y en muchas oportunidades estar dispuesto a esperar bastante tiempo antes de poder ver los frutos de tamaño esfuerzo.

Luego de investigar sobre el tema encontré una lista de preguntas a la cual todo emprendedor debiera tener respuesta antes de decidir emprender.

¿Qué quiero hacer?
Qué proyecto de negocio tenemos. Ya sea porque se nos ocurrió una idea innovadora, porque encontramos un servicio existente el cual creemos que se puede mejorar, satisfacer nuevas necesidades o hasta la posibilidad de importar modelos de negocio de otros países y aplicarlos localmente. Cualquiera sea el caso es muy importante definir claramente que quiero hacer.

¿Quién va a formar parte del proyecto?
Este punto es fundamental y donde hay que tener especial cuidado. Antes de incorporar gente a nuestro proyecto debemos tener en claro si realmente es la adecuada, si complementamos habilidades, si podemos trabajar juntos, hay una conocida máxima de evaluación de proyectos que dice: Un proyecto B con un equipo A vale más que un proyecto A con un equipo B. Esto refleja importancia del equipo emprendedor, como se complementa, como trabaja, su fortaleza en pasar dificultades, etc. porque al fin y al cabo el principal factor que determinará el éxito o fracaso de un emprendimiento es la gente que lo lleva adelante.

¿Cómo y cuando se va a implementar la idea?
Aquí juego un rol muy importante el plan de negocios donde debemos describir qué estrategias vamos a seguir para llevar nuestra empresa hacia los objetivos fijados. Muchos dicen que el plan de negocios solo sirve para no cumplirse, pero que no lo cumplamos no quiere decir que no sea útil. Saber a donde vamos y como haremos para llegar es fundamental para guiarnos en los momentos difíciles y si sobre la marcha decidimos cambiar de rumbo lo haremos a conciencia y luego de evaluar las diferentes alternativas.

Es muy tranquilizador tener un plan, por más que ese plan diga “durante los próximos 2 meses no se que voy a hacer” suena absurdo, pero saber que uno esta en la tormenta es el primer paso para salir de la misma o para soportarla con templanza.

¿Dónde establecer la empresa?
Ya sabemos qué queremos hacer, con quién y cómo lo vamos a hacer. Ahora hay que decidir dónde iniciar el emprendimiento. Este punto adquiere mayor o menor relevancia dependiendo de que tipo de negocio elijamos. Todo equipo emprendedor debe tener muy en cuenta donde va a a desarrollar sus actividades y porque. Como dato adicional deben saber que existen incubadoras gratuitas para proyectos en etapa inicial.

¿Con qué contamos para empezar?
Cuando las empresas están dando sus primeros pasos demandan gran cantidad de recursos, los emprendedores deben definir previamente hasta cuanto están dispuestos a arriesgar, ya sea en dinero, tiempo, contactos, utilización de recursos, etc.

Santiago R. Peyré
Tecnopyme Activa

sábado, 18 de diciembre de 2010

El arte de emprender: siete motores de éxito


Con frecuencia oímos y leemos en diferentes artículos y blogs que en épocas de incertidumbre una buena alternativa laboral es el emprendizaje. Parece como si en épocas de bonanza y mayor bienestar debiéramos estar paralizados, vivir con el “pájaro en mano” y olvidar “los cientos volando”, dejar los experimentos y guardar los excedentes de capital para cuando vengan mal dadas… Frases hechas todas pensadas para generar inmovilidad.

La realidad es que los verdaderos emprendedores no dejan de serlo ni de hacerlo en ningún momento de su carrera. Son individuos que viven su profesión pensando en el cambio de forma constante, que saben que la transformación colectiva e individual es necesaria para sobrevivir, que se adaptan entendiéndola como la manera continua de seguir vivos. Adaptarse o desaparecer –como escribió Charles Darwin en 1859-, ésta es la idea que persigue y vive en un emprendedor, sea éste empresario, artista, trabaje en el departamento contable de una gran multinacional o sea un modesto profesor de una escuela de negocios…

He sido invitado a lo largo del año 2011 a participar por diferentes provincias y en empresas tanto nacionales como multinacionales en diferentes foros sobre un tema de moda en estos tiempos: “El arte de emprender”.

Estos eventos me llevan a reflexionar sobre qué motor de éxito y cambio tienen esas personas que dedican su energía y tiempo a emprender. Y fruto de una primera reflexión he descubierto que cualquier emprendedor tiene siete elementos básicos que le caracterizan o que comparten una serie de características: creencia firme en una idea, valoración positiva del éxito, modelo o proyecto en mente, argumentación valorada, defensa y creación del prototipo. Estos siete motores encienden el fuego que habita dentro de un emprendedor:

1. Encuentra la diferencia
El camino diferente, su vaca púrpura, ésa que Seth Godin describió en su famoso libro. Nos descubre un punto de locura esencial, necesario para que le genere una dosis extra de valentía, de coraje para empezar el proyecto, de energía para transformar una idea en acción y mantenerla en el tiempo. No es la corriente del agua lo que le arrastra, sino que nada eligiendo el camino. Sabe que sólo los peces muertos son arrastrados por la corriente.

2. Es realista
Porque serlo no es otra cosa que vivir con “su realidad”, porque observa la realidad desde otro lado, de una forma desacostumbrada, y porque sabe diferenciar lo que es potencialmente realizable -aunque sea difícil- de lo que es alucinantemente irrealizable.

3. No confunde capacidad creativa con genialidad. No será un genio, pero puede con esfuerzo mantenido, disciplina y voluntad sacar adelante su proyecto. Esta capacidad creativa le permite no confundir lo imposible con lo difícil. Cuando es imposible buscará nuevos caminos posibles; cuando es difícil no cederá en el empeño y buscará las energías que le lleven a su objetivo.

4. Es humilde
Sabe que en el camino hay que seguir aprendiendo, escuchando, evaluando, cambiando si es necesario, adaptándose. Huye del dogmatismo, del miedo tóxico y de la complacencia. Sabe que vive en la era de la colaboración, donde el verbo compartir es básico para subsistir. Está abierto a nuevas tecnologías y a nuevas maneras de hacer.

5. Tiene capacidad resiliente.
Ha entendido el sufrimiento como algo con lo que le tocará convivir. No abandona en el presente, se enfrenta a las dificultades que le llegan sin apartar la mirada del futuro que espera. Sabe que la verdadera paradoja creativa pasa por convertir las adversidades en fuerzas, en motores de éxito.

6. Se nutre de múltiples culturas. Escucha empáticamente y explora sin cesar. El analogismo es algo que vive en su mente de forma imperceptible. Es curioso. Se enriquece con casi todo. Cambia su interior crítico por un desarrollo interno creativo.

7. Le apasiona lo que hace
Ha entendido su vocación desde el amor. Sabe que la ilusión se genera desde el entusiasmo y que le llevará a crear metas y conseguirlas.

Y por si todos estos motores fueran pocos: emprender es una forma fantástica de afilar continuamente el lápiz, de desarrollar un aprendizaje continuo. Razón suficiente para no perdérselo…

Fernando Botella
CEO de Think & Action
www.expansion.com
Imagen: Web

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Cualidades de un emprendedor exitoso


Hay muchos emprendedores que desean crear un negocio exitoso, pero pocos lo consiguen. Descubre qué cualidades debes cultivar para triunfar con tu empresa.

En el mundo hay muchos emprendedores con ánimo de surgir y crecer con su negocio. Pero son muchos menos los que consiguen una carrera de éxito.

El éxito es una palabra mal entendida por muchos y por la cual casi todos luchan perdiendo el rumbo. El error está en querer el éxito por el éxito y nada más, puesto que los emprendedores que realmente consiguen triunfar con sus proyectos de empresa y crecer, buscan algo más.

Estos emprendedores no se derrumban con una derrota y no se rinden con un obstáculo, tienen una visión más amplia y consiguen planificar una estrategia distinta. Ellos poseen cualidades distintas. Algunos nacen con ellas, pero muchos otros las cultivan con el tiempo.

Por eso, aquí te presentamos una serie con las siete cualidades claves que deberías cultivar o detectar para ser un emprendedor con éxito. Toma nota:

Curiosidad
Ser capaz de ver algo más allá de lo obvio y buscar respuestas debe ser parte del perfil de un gran emprendedor. Si quieres encaminarte por buena senda, debes ser curioso por naturaleza, preguntarse cómo funcionan las cosas, por qué las personas compran un producto o dejan de hacerlo, o cómo un pequeño cambio conduce a grandes resultados.

Calibrar los riesgos
Hay riesgos que son, a todas luces, inasumibles y que pueden conducir directamente al fracaso empresarial. Medirlos es una cualidad. No se trata tanto de arriesgarse por el hecho de hacerlo, sino que el emprendedor posee la capacidad de descubrir oportunidades de negocio en donde otros no ven nada especial. Además tiene la suficiente confianza en sí mismo y en sus capacidades como para apostar por esas oportunidades.

Planificación
Todo emprendedor que se precie de tal suele contar con un plan previo de actuación. Es capaz de contemplar un escenario general en que planificar el conjunto de su actuación para un proyecto concreto, determinar causas y consecuencias de sus decisiones, y observar el conjunto con perspectiva.

Confianza
Alguien en quien se puede confiar, pues se mantiene siempre sus promesas y tiene la capacidad de extender esa confianza a todos los ámbitos de su actividad empresarial.

Aprenden de sus errores
Es vital que no caigas en la auto-complacencia y que no te hundas ante los obstáculos. Al contrario, debes aprender de cada obstáculo y verlo como una oportunidad para volver a evaluar tu proyecto y pulir las fallas.
Los emprendedores de éxito no suelen creerse los mejores de su sector, pues valoran la competencia, y tienen capacidad de aprender y valorar lo que hacen los demás.

Pragmáticos
Esto no quiere decir que no sean soñadores e idealistas, sino que son muy conscientes de lo que pueden hacer y de lo que no pueden hacer. En este sentido tienen que tener un fuerte sentido del orden y de la proporción.

Visión espacial
Son capaces de determinar fácilmente cómo existe un hilo conductor en un conjunto de ideas que para muchos parece disperso. Entienden la relación existente entre conceptos abstractos con rapidez.

www.SoyEntrepreneur.com

domingo, 28 de noviembre de 2010

Cómo emprender en las redes sociales


Cada vez más se las crea para ofrecer bienes y servicios. Ventajas, desventajas y consejos prácticos

El costo cero y la masividad hacen que cada vez más emprendedores se animen a utilizar las redes sociales como vidriera de sus productos y servicios, pero puede ser un arma de doble filo que se debe utilizar adecuadamente para no fracasar. Por eso es fundamental escuchar las recomendaciones y experiencias de los que ya se han animado.

Los protagonistas
Entre los numerosos emprendimientos nacionales que ya están presentes en las redes sociales se destaca Yo te lo Explico. Se trata de un emprendimiento de Sofía Serrano y Magdalena Cash, que fundaron Azafrán Producciones, una productora audiovisual que se especializa en contenidos periodísticos y educativos para Internet. Luego, en febrero de este año crearon Yo te lo Explico (YTE), que propone explicar noticias e información de interés general sobre la Argentina con videos de tres minutos. "Comenzamos publicando los informes en las redes sociales Facebook y YouTube y el siguiente paso fue lanzar nuestra propia red social", cuenta Cash. Además, Yoteloexplico.com permite, también, que sus usuarios puedan interactuar agregando información, chateando y opinando, entre otras acciones. "La diferencia entre YTE y otras redes sociales es que éstas son de temáticas abiertas, en cambio la nuestra es una plataforma virtual interactiva al servicio de la ciudadanía para debatir temas que hacen a nuestra realidad como argentinos", afirma Serrano.

Otro caso interesante en el nivel local es RealRef.com, una comunidad laboral online y gratuita donde los usuarios dan sus referencias de las organizaciones en las cuales trabajan o trabajaron, de manera anónima si lo desean, y al mismo tiempo conocen las referencias de los demás usuarios. Estas opiniones ayudan a tomar mejores decisiones profesionales. Además, en este sitio las empresas pueden ver cómo son percibidas por sus empleados o ex empleados, y pueden publicar sus ofertas laborales. "RealRef brinda un espacio en el que cualquier persona que haya tenido experiencia laboral en una determinada empresa puede calificarla y hacerse escuchar sin limitaciones", destaca Mariela Sporn, fundadora del sitio.

Bueeno fue otra de las empresas consultadas. Esta se dedica a la publicación y el desarrollo de contenidos digitales de entretenimiento. "Nuestro foco son los juegos sobre plataformas de redes sociales y móviles", dice Francisco Okecki, socio gerente de Bueeno.

Pros y contras
Entre las principales ventajas que ofrecen las redes sociales, Pablo Medina, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Palermo (UP) y moderador del seminario Jóvenes Emprendedores, que dictó esa facultad, destacó el efecto del boca en boca. "Además, el mensaje se expande mucho más rápido y a muchas personas. Es que los usuarios están más dispuestos a creer en la recomendación de un amigo conocido que en la de un desconocido", comenta.

Al hablar de los contras, el profesor de la UP destacó que la inmediatez también puede ser perjudicial para aquellas empresas que prometen algo y no cumplen, o que trabajan con bajos estándares de calidad. "Este tipo de empresas terminan siendo escrachadas en las redes", asegura.

Según Cash, otro aspecto negativo que tienen las redes sociales a la hora de pensar en los negocios es que aún es muy difícil obtener dinero de este canal porque la mayoría de las empresas prefieren pautar en televisión, radio o gráfica. "Además, los usuarios de las redes quieren publicidad no invasiva y es difícil generar masa crítica de usuarios fieles a una página", agrega.

Por su parte, Sporn destaca que las redes sociales posibilitan la democratización de la información y el diálogo, amplificando las voces de los usuarios. "Y nos permiten vincularnos, interactuar, participar y acercar la distancia con personas con las que tendríamos que invertir mucho tiempo y esfuerzo para contactarnos por otro medio", agregó.

Hablando de su sector y las redes sociales, Okecki manifiesta: "Lo interesante es que este nuevo canal ha generado cientos de millones de nuevos jugadores en Internet, que no existían hasta hace poco y que nadie pudo predecir".

Para tomar nota
Aquellos que tienen proyectado lanzar su emprendimiento necesitan tener en claro algunos aspectos propios de este nuevo medio. "En las redes sociales se debe segmentar muy bien la audiencia, mantener actualizado el sitio en forma diaria o semanal, y fundamentalmente, elegir bien las acciones que se van a realizar", señala Medina. Además considera que es muy importante estar preparado para responder proactivamente (tener gente, stock, etcétera) frente al incremento probable de la demanda, fruto de la acción que se realice en las redes sociales.

Entre los errores frecuentes, el socio gerente de Bueeno destaca que uno de los más habituales en su mercado es no analizar el comportamiento del usuario.

Por su parte, Serrano recomienda ser pacientes y constantes porque los resultados se ven a largo plazo. "Tienen que trabajar en equipo creando sinergias. Emprender en una red social implica replicar la red social en la organización. Además, siempre se debe escuchar y responder a los usuarios. También es importante innovar y ser creativo", afirma.

La fundadora de RealRef considera que lo esencial para llevar adelante un emprendimiento en las redes sociales es contar con un equipo sólido y tener en cuenta la manera en que se va a financiar el emprendimiento. "También creo que es importante escuchar opiniones y estar abierto a perfeccionar el proyecto, con el fin de obtener mejores resultados día a día", agrega.

Actualmente existen muchos emprendimientos que utilizan las redes sociales para darse a conocer, pero en el nivel nacional hay pocos que desarrollaron una propia. "Dentro de poco tiempo empezarán a salir muchos proyectos de redes sociales más específicos y centrados en un nicho particular, como por ejemplo una red social para gente que ama los perros", vaticina Medina.

Cintia Perazo
Tecnología - Diario La Nación
Imagen: Web

sábado, 20 de noviembre de 2010

El emprendedor, la hoja en blanco, el foco y el costo de la oportunidad


Un emprendedor es alguien que ha visto una oportunidad y se ha lanzado de cabeza a intentar explotarla. Para llegar a seleccionar esa oportunidad habrán pasado bastantes por su cabeza. Esta inquietud permanente, el análisis de las cosas de una forma distinta al resto de la gente, el asumir riesgos y el encontrar ideas o oportunidades nuevas cada día, son algunas de las características de todo buen emprendedor.

Estas características de todo buen emprendedor no desaparecen una vez iniciado su proyecto, pueden quedar relegadas a un segundo plano temporalmente, pero varios factores pueden despertarlas de nuevo: ser emprendedor representa tener cada día una hoja en blanco, poder decidir sobre el destino del proyecto constantemente. Del mismo modo mucha gente y muchos otros emprendedores se le acercarán con potenciales sinergias. Finalmente, el día a día de su empresa puede hacer que el emprendedor vea o intuya otras oportunidades y caiga en la tentación de pensar que quizás le sería más fácil tener éxito con esas nuevas oportunidades que con su proyecto actual.

Si algo diferencia el emprendedor maduro del novel, es precisamente ser consciente de estas tentaciones, saber controlar su instinto, por el bien de su proyecto actual. Y esta consciencia es de las cosas que dificilmente se aprenden sin haber pasado por ellas, en este caso habiendo sucumbido a la tentación y viendo sus consecuencias. Como cualquier otro que ha pasado por ello, creo que existen dos conceptos importantes que todo emprendedor termina teniendo claro, el coste de la oportunidad y el foco.

En una startup existen dos recursos especialmente limitados, el tiempo y el dinero. Cada hora y cada euro que se dedica a experimentos o aventuras alejados del objetivo fijado para la empresa, es una perdida dificilmente recuperable. El coste de la oportunidad es pues lo que podríamos ganar de más haciendo algo distinto a lo que estamos haciendo, y con recursos limitados, hay que tener muy claro donde nos lleva cada una de nuestras decisiones. Muchas veces nos engañamos a nosotros mismos queriendo probar algunas de estas oportunidad con la excusa de la innovación, o el querer encontrar nuevos mercados para la empresa. Esto puede servir para empresas maduras, pero para una startup y para un emprendedor, queda algo lejos. En una startup tenemos que hacer una cosa bien, y dedicar todo nuestro esfuerzo a ello. Si diluimos este esfuerzo en aventuras propias, o peor, en aventuras propuestas por terceros, es muy probable que no lleguemos a ningún sitio.

Por todo esto, si hay una palabras que todo emprendedor y toda startup deberían aprender es ‘foco’. Enfocarse a la visión y objetivos definidos y luchar por ellos con todas sus fuerzas y sus recursos. En el camino se van a presentar muchas oportunidades, algunas pueden ser buenas y quizás llevarnos al éxito, pero el emprendedor maduro sabe que la gran mayoría son sólo distracciones que pueden ser mortales para un proyecto que ya de por si tiene muchas incógnitas.

¿Y cuál es la mejor forma de llevar a la práctica el foco? Saber decir ‘No’. Es simple, quizás hasta obvio, pero es muy difícil llevar a la práctica para aquellos que ven ideas y oportunidades continuamente. Para un emprendedor pues, la estrategia no es un complejo plan sobre como la empresa va a llegar a su objetivo, la estrategia es tener un objetivo claro y saber muy bien a lo que decir que no.

Albert Armengol
Médico, MBA, emprendedor de Internet (fundador de eConozco, Bloguzz, Festuc) y business angel, actualmente es cofundador y CEO de Doctoralia
Fuente: Cotizalia
Imagen: Web


sábado, 13 de noviembre de 2010

Cuándo y Por Qué Contratar a un Consultor de Empresas


Se nos pregunta, con frecuencia, a los consultores de empresa a qué nos dedicamos o cual es nuestro trabajo. La respuesta concreta no es fácil, pero sí lo es cuando decimos que somos como “médicos de empresas y comadronas”. Pero esto requiere una explicación. Veamos.

En primer lugar, un consultor de empresas es aquel que presta servicios profesionales a éstas en cualquier ámbito económico, financiero o técnico que no sean los tradicionales trabajos de asesoramiento contable, fiscal, laboral o auditoria.Todos estos tienen su propia catalogación como tales. Por tanto, el consultor de empresas se dedicaría a todo lo demás que la empresa le requiera.

Por otra parte, el consultor de empresas suele ser un generalista, en el sentido de tocar diversos temas, más porque están muy interrelacionados que por conocimiento superficial en el estricto sentido del término. El consultor se ve obligado a saber de cosas distintas como el profesional de medicina general sabe de muchas enfermedades y dolencias. El consultor profesional, no el amateur, debe estar al día en mil cuestiones fiscales, económicas, financieras, laborales, mercantiles o técnicas diversas. Luego ha de estudiar y reciclarse continuamente.

El consultor de empresas, con el paso del tiempo, va conociendo tantas empresas, sectores y situaciones diferentes, que su bagaje de conocimientos es muy amplio. Además, al final, la empresa es un todo que asemeja mucho unas a otras en sus cuestiones fundamentales. El consultor acaba manejándose con seguridad en toda clase de empresas y negocios.

Pero, además, es algo así como una “comadrona”, ya que ayuda y colabora eficazmente en el nacimiento de muchas empresas y negocios. Lo hace aportando ideas iniciales, haciendo cálculos y estudios, previsiones y estimaciones económicas, financieras o técnicas, indica a los promotores o socios el camino a seguir y ayuda, o él mismo lleva a cabo, todos los pasos de creación y puesta en marcha de las empresas.

Su campo es extenso y variopinto. Cuestiones tales como: planes de viabilidad o de negocios, estudios económico- financieros, creación y constitución de sociedades, intermediación de negocios, consultoría de gestión, operaciones societarias, planes para solventar crisis empresariales, la sucesión de la empresa familiar o el consulting técnico puro, son algunos de los botones de muestra de los catálogos de servicios de los consultores.

¿Razones para contratar a un Consultor de empresas? Podemos entresacar algunas de ellas que no agotan el repertorio.

1ª.- En las empresas y negocios, surgen infinidad de situaciones ligadas a toma de posiciones o de medidas que requieren pararse a pensar y analizar los pros y contras. Como siempre, cada cual es mal consejero de sí mismo. Y además, muchas veces se requieren conocimientos específicos y personas expertas. El Consultor suele reunir estos condicionantes.

2ª.- Si se elige a un profesional experto, con la titulación adecuada al caso, que acredite su experiencia, normalmente sabrá comprender bien su problema y situación, y podrá orientarle adecuadamente.

3ª.- Se debería de huir, en este asunto y para cosas serias, de aficionados. Sea por lo que fuere, este mercado de profesionales le presenta, mezclados y en el mismo saco, firmas y profesionales con trayectoria amplia y contrastada, que tienen experiencia de verdad, con diversas personas que o tienen esto como ocupación complementaria a otra, que es para ellos la principal, o han venido a caer en este campo por rebote de otros o atraídos por las posibilidades de este sector profesional, cuando no por su nivel de relaciones públicas o institucionales.

4ª.- A la hora de elegir a un consultor de empresas para que le ayude en sus asuntos, debería solicitarle un presupuesto serio y una “hoja de servicios o de referencias” que le ponga en antecedentes de quien tiene Vd. delante. Huya de la palabrería y las promesas envueltas en excesos verbales y optimismos desmesurados.

5ª.- El Consultor de empresas le puede aconsejar antes de emprender inversiones, constitución de sociedades, inicio o ampliación de nuevos negocios o actividades y casos similares. En estos casos, conviene poner encima de la mesa todos los datos y analizar la evolución en el tiempo (corto y medio plazo) de las cuentas de resultados, balances y cash flow. No hacerlo así, estudiando todas las variables a considerar, es caminar a ciegas y con riesgos innecesarios. El futuro ya traerá, por si mismo, incertidumbre e incidencias imprevistas como para añadir otras por dejadez o falta de previsión.

6º.- El Consultor de empresas se puede encargar, también, de aspectos tales como convocar y coordinar reuniones de socios o posibles socios, informar a estos últimos, ayudar en su búsqueda, hacer gestiones ante Organismos oficiales, informarle sobre subvenciones que puedan afectar a su proyecto y tramitárselas, planificar los pasos a dar, hacer los estudios económicos o de viabilidad o planes de negocios para presentar ante Instituciones Financieras o socios potenciales, estar a su lado en toda clase de negociaciones y un sinfín más de servicios posibles.

7ª.- Es prácticamente imprescindible la ayuda del Consultor en situaciones de crisis o de problemas económicos y financieros. Toda la variante que va desde simples problemas de tesorería y dificultades puntuales hasta situaciones de suspensión de pagos o quiebras, son objeto del trabajo de Consultores de empresas con experiencia. En muchas ocasiones serán, o tendrán en su plantilla, expertos en cuestiones concursales.

8ª.- En ocasiones Vd. tendrá que acudir a un bufete de abogados. Unas veces serán sus abogados y otras ajenos o de “la otra parte”. Cuando haya por medio balances, cuentas, cuestiones económicas o financieras que le afecten, su mejor compañía será, si se trata de temas serios, un Consultor de empresas. En muchas ocasiones, un gestor o un asesor fiscal contable, no será suficiente si se trata de temas de más calado.

9ª.- No debiera Vd. dejarse llevar por la falsa leyenda de que un buen Consultor o es de la capital de España o lleva unas siglas en inglés, o no tiene nivel. Esto es un falacia y, con frecuencia, un simple efecto de restos de papanatismo todavía existente. En la mayoría de las ciudades existen Consultores preparados y expertos. Se trata de encontrarlos y poner en ellos su confianza. Lo otro, lo de la gran firma madrileña o anglosajona, le costará mucho más y, en ocasiones, no le garantiza la resolución de su problema.

10ª.- Con frecuencia, una empresa está dispuesta a pagar lo que le cobren o lo que sea al Consultor venido de “lejanas tierras” o de nombre en inglés. En cambio, regatea sus honorarios al Consultor local o de su autonomía. No sea Vd. de esos. Esta forma de actuar no es sinónimo de éxito como se puede comprobar con cierta frecuencia. Un Consultor más próximo a su nivel de empresa, a su entorno geográfico y a sus circunstancias, baqueteado en la vida de las PYMES, tiene sus ventajas.

Fuente: Gestiópolis.com.

sábado, 6 de noviembre de 2010

Elevator Pitch: Tu carta de presentación ganadora


El Capital Social es una fuente vital de recursos para emprendedores. Integrado por tus contactos personales directos, los contactos de tus contactos, los grupos en los que participás y diversos vínculos de negocios y de otros intereses, genera una Red (Network) en la cuál vos también sos parte.

A través de tu vinculación con otras personas (Networking), es posible generar muy buenos negocios o tener la posibilidad de iniciarlos.

Y para ser efectivo en la obtención de recursos, necesitás comunicarte en forma precisa, breve y convincente.

¿Como se hace? A través del “Elevator Pitch”

Elevator Pitch: La herramienta fundamental
El “Elevator Pitch” es una técnica de comunicación breve que te facilita el contacto e intercambio de información con otras personas que no conocés, para iniciar un camino productivo ganar-ganar para todos.

Es lo que tenés que utilizar en reuniones de networking o en todas las actividades donde puedas hacer networking.

Los capitalistas de riesgo lo definen como una extremadamente concisa presentación, por parte de un emprendedor, de una idea, un modelo de negocios, una solución que brinda una compañía, una estrategia de marketing, etc. dirigida a un potencial inversor o interesado. También como una descripción no mayor a 1 minuto acerca de una compañía que aliente a su audiencia a convertirse en inversores, socios, empleados o clientes, a través de una clara y sólida propuesta de valor.

No es una simple introducción de una idea. Debe incluir visión, pasión y el expertise para llevarla a cabo.

Debés preparar una autopresentación de 30”, que culmina en una pregunta (la que posibilita ir generando Networking). Y disponés de otros tantos segundos para procesar la respuesta del otro.

Redactá tu autopresentación, así la vas puliendo. Luego testeala con amigos, colegas, personas de confianza, y busca feedback.

Hay 3 partes para una buena introducción de 30”:

1) Preséntate
Comenzá con tu nombre, el nombre de tu proyecto o negocio, su ubicación geográfica y una breve descripción del concepto de tu negocio. Hacelo en 10” máximo.


Ejemplo: Hola! Soy Carlos Perez, fundador de “dulces recuerdos”. Somos un emprendimiento dedicado a elaborar dulces artesanales de bajas calorías, y estamos ubicados en Villa Devoto.

2) Ejemplificá sobre el trabajo que hacés o la idea general de tu proyecto, en un esquema PAR
(Problema / Acción / Resultado), mencionando un punto sobre el cuál quieras destacar en especial. Esto hacelo en no más de 10”.

Problema: Enunciá el motivo por el cuál un cliente (o potencial cliente) necesita ayuda en el marco de tu negocio

Acción: Describí que hiciste (o que tenés pensado hacer) para resolverlo o como hacés habitualmente.

Resultado: Ilustrá con hechos y datos en lo posible, como solucionaste el problema del cliente (o pensás solucionarlo)

Ejemplo: Detectamos que muchos hoteles tienen huéspedes sensibles a la buena nutrición y mantenerse delgados. Les preparamos una línea de productos dulces gourmet de bajas calorías, y ahora tenemos 15 clientes solicitándonos estos productos.

3) Expresá claramente que estás necesitando en forma prioritaria.
No hagas foco en una venta. Genera dudas y muchas veces mala impresión. Se creativo. El Networking tiene que ver mucho más con reunir información más que presentar rápidamente tu oferta comercial. También pedí la opinión de tu interlocutor y sugerencias. O bien si a su vez tiene contactos del perfil que pueden interesarte, y que perfiles le interesan a el que vos podés presentarle. Utilizá tus últimos 10 segundos.

Ejemplo: Actualmente estoy explorando canales minoristas de venta. Tenés conocidos que ofrezcan productos dulces, repostería o bien productos gourmet en locales bien ubicados? Realmente me vendría muy bien. Y vos, que tipo de contactos estás necesitando?
Reglas a seguir
  • Ser breves
  • Fácil de entender
  • Considerá las necesidades de tu interlocutor
  • No dejes dudas
Siempre es necesario generar el “pitch”: Querés conseguir capital? Necesitás comunicar tu plan. Querés atraer socios estratégicos? Debés enfatizar los beneficios de asociarse con vos.

Siempre hay que explicar el mensaje en forma entendible, convincente y concisa. Es una habilidad esencial para todo emprendedor, aunque mayormente olvidada.

En pocas y breves oraciones, tenés que ligar tus propias necesidades con las necesidades y deseos de tus interlocutores, y como la propuesta de tu emprendimiento puede satisfacerlas.

Marcelo Berenstein
Emprendedores.News
Imagen: del articulo

miércoles, 27 de octubre de 2010

Las dos caras de los superángeles de capital riesgo


Uno de los principales cometidos de las compañías de capital riesgo es financiar emprendedores prometedores. El sentido común, que muchos dicen ha caído en desuso a medida que las empresas más antiguas han madurado, dice que los retornos son mejores cuando las compañías de capital riesgo son emprendedoras, ágiles, valientes, bien relacionadas y con un apetito por el riesgo.

Una nueva cosecha de inversores de riesgo pequeños y ágiles, y que entienden de tecnología, llamados superángeles, están intentando rescatar ese modelo de inversión, llevando a cabo operaciones que pesos pesados como Kleiner, Perkins Caufield & Byers y Sequoia Capital habrían hecho en sus comienzos.

Al ocupar una posición intermedia de financiación entre los llamados “business angels” y las empresas de capital riesgo, los superángeles presentan características comunes a ambos, pero además de crear y construir empresas cuentan con un conocimiento oportuno de contenidos digitales. En general, se trata casi siempre de emprendedores; muchos vienen de Google y Paypal. Están muy bien relacionados en el área tecnológica, con los ángeles convencionales y las grandes empresas de capital riesgo.

Aunque casi ninguno ponga el número de teléfono en sus webs, son grandes usuarios de Twitter y tienen blogs. Con frecuencia hacen referencias o comentarios sobre los posts de otros superángeles. Ellos dicen que siempre actualizan el perfil que mantienen en las redes sociales porque genera comentarios sobre su trabajo. También fomentan la imagen de formar parte de una comunidad selecta y sofisticada de fundadores e inversores.

Mientras los ángeles tradicionales invierten sólo dinero propio, los superángeles gestionan pequeños fondos donde su dinero se mezcla con el dinero de amigos, familiares y oficinas encargadas de gestionar las finanzas de grandes familias acaudaladas. Algunas empresas de superángeles gestionan el capital institucional de universidades además de otras instituciones, y al menos algunas dicen que deberán dar mayor prioridad a ese tipo de fondos, a medida que construyen un historial de rendimiento.

Los superángeles normalmente operan con fondos con una inversión de US$ 10 millones o menos, aunque están comenzando a romper esa marca. Las inversiones individuales hechas por sus empresas suelen situarse por debajo de US$ 500.000. A veces, ese valor puede llegar a decenas de miles de dólares, pero raramente llega a US$ 1 millón. Por el contrario, las inversiones individuales de las firmas de capital riesgo tradicionales son, por norma, multimillonarias. Cuando una empresa en su etapa inicial necesita de US$ 500.000 a US$ 2 millones, los superángeles prefieren ampliar el número de inversores asociados a emitir un cheque de valor elevado.

Al igual que los inversores ángeles, los superángeles están especializados en empresas en fase inicial de desarrollo, invirtiendo generalmente en ideas que, al principio, son poco más que una "presentación en Power Point" en términos de resultados tangibles, según explica Josh Kopelman de First Round Capital, compañía de superángeles de Filadelfia. De momento, la mayor parte parece decidida a quedarse en esta etapa, aunque algunas estén comenzando a reservar parte de sus fondos para hacer inversiones adicionales con el objetivo de ayudar a sus empresas nuevas a crecer y a desarrollarse plenamente. Eso permite a las empresas "apostar con más fuerza por las compañías más prometedoras", observa Roger Ehrenberg, superángel de Nueva York. Además de eso, las inversiones adicionales pueden ser necesarias para evitar que se diluya de manera significativa la participación de la empresa en la start-up, si ésta decide recurrir a las grandes compañías de capital riesgo, señala Bo Brustkern, ex-inversor de riesgo que hoy gestiona una empresa de consultoría.

Mientras ángeles y firmas de capital riesgo invierten en una amplia variedad de sectores, los superángeles se especializan en sólo algunos negocios, donde los costes de iniciación de un proyecto son mínimos, los índices de consumo de la inversión son simbólicos y la operación se estabiliza en el plazo de seis meses a un año si la idea es factible. Ellos invierten en telefonía móvil y software de Internet, herramientas para redes sociales y plataformas, ciber publicidad y negocios de medios —algunos se especializan en empresas y otros en consumidores. Un ejemplo extremo de lo que puede suceder en una inversión de ese tipo: Chris Sacca, fundador de la empresa de superángeles Lowercase Capital, en Truckee, en California, señala, "Tengo una empresa en mi cartera con una tasa de consumo de inversión de US$ 3.500 al mes. El coste no es la tecnología; es el personal, la alimentación y el alquiler".

No hay superángeles en sectores que demandan un gran volumen de capital, como es el caso de los segmentos de hardware, semiconductores, comercio minorista, biotecnología, ciencias humanas o tecnología limpia, dice Manu Kumar de superángeles K9 Ventures de Palo Alto, en California, que gestiona solo. Fue una elección inteligente, dice David Hsu, profesor de Gestión de Wharton, porque "la tecnología de vanguardia ya se ha vuelto una commodity. Por lo tanto, la pregunta que se debe formular es la siguiente: ¿usted es capaz de descubrir una buena idea y conseguir gente que esté en condiciones de ejecutarla?". Si los superángeles lo logran, generalmente no importa mucho si la idea inicial de la start-up fracasa. Con tasas de inversión como las que ellos manejan, "pueden perfectamente permitir que una empresa nueva repita varias veces una misma etapa, evolucione y ajuste su avance" hasta llegar a un plan de negocio lucrativo, destaca Kopelman.

Recuperación de la inversión rápida, retornos menores
Ese tipo de estrategia explica por qué los superángeles, por lo menos de momento, parecen tener una tasa más baja de fracasos absolutos que las grandes compañías de capital riesgo, dicen los observadores. Ehrenberg, superángel de Nueva York, invirtió en 40 empresas en los últimos cinco años y medio. Él se salió de cinco, pero sólo tres fueron un fracaso total. Las demás recibieron inversiones aún mayores o aún están buscando alternativas valiéndose de los fondos de que disponen.

Mientras los ángeles esperan pasar las empresas en que invierten a la próxima etapa de la cadena alimenticia, vendiendo su parte a inversores de riesgo tradicionales, los superángeles normalmente evitan las grandes empresas. En vez de eso, sólo permiten que sus emprendedores vendan la empresa a otra mayor, como Google, Facebook, eBay o Microsoft, después de que la start-up haya probado que su idea funciona, pero antes de crear un mercado específico (lo que, por norma, exige mayores inyecciones de capital). Tácticas de ese tipo tienen como resultado salidas rápidas de las inversiones realizadas, cosa que los inversores de riesgo y los ángeles no suelen hacer, además de proporcionar retornos monetarios más modestos que los ingresos a los que están habituados.

Actualmente, las compañías tradicionales de capital riesgo invierten de cinco a nueve años en una empresa, según datos de Dow Jones VentureSource. Normalmente, los ángeles sólo pueden vender su participación en una empresa después de que el resto de inversores hayan vendido la suya, observa Brustkern. Por ejemplo, la empresa superángel Felicis Ventures ya ha pasado por 15 eventos de liquidez [venta de la participación adquirida] desde que su fundador, Aydin Senkut, comenzó a invertir en la empresa a principios de 2006. Él dice en su web que los eventos tuvieron lugar en un intervalo de tres años y medio después de la inversión inicial en la empresa.

Las adquisiciones hechas por las empresas en las que tienen participación los superángeles generalmente se sitúan en una franja de US$ 10 a US$ 50 millones. Los compradores son la mayor parte de las veces empresas de tecnología con mucho dinero en caja. "Empresas de gran tamaño como Google, Facebook, News Corp., Motorola, Amazon, Yahoo! y Microsoft prefieren comprar start-ups, ya sea una empresa de captación de talentos a US$ 2 o US$ 3 millones por ingeniero, o jóvenes empresas estratégicas de US$ 20 millones que estén próximas al punto de inflexión", dice Sacca.

Esos valores son irrisorios para los estándares de los inversores de riesgo, pero Hsu destaca que "en vista de los bajos costes de las inversiones iniciales, basta una tasa modesta de éxito para que el retorno sea considerado suficiente durante el periodo de inversión en relación al riesgo incurrido". Kumar coincide con este punto de vista. "Si estoy invirtiendo centenares de miles de dólares en una empresa que después se vende por US$ 50 millones, eso es un buen retorno. Los superángeles dependen de muchos buenos retornos". Por ejemplo, una de las historias de éxito del sector es el de Invite Media, empresa de publicidad digital fundada a principios de 2007 y que recibió un aporte inicial [conocido en el entorno financiero como capital semilla] de First Round Capital a finales de aquel año. Dos años después, la start-up recibió otra inyección de capital de First Round, además de inversiones de una empresa de capital riesgo, pero el total "era menos de US$ 5 millones", dice Kopelman. En junio de este año, los fundadores de Invite Medía vendieron la empresa a Google por US$ 80 millones, según informaciones publicadas.

Algunos analistas de la industria de riesgo se han quejado últimamente de que los superángeles están acortando el tiempo de vida de empresas que podrían ser "el próximo Google" al venderlas antes que hayan tenido tiempo de desarrollar un mercado. Otros, sin embargo, creen que no son más que comentarios de gente frustrada: al permitir que algunos de los fundadores más brillantes y prometedores vendan su participación demasiado pronto, los superángeles perjudican el flujo de los negocios de los inversores de riesgo —que necesitan de un flujo muy bueno para sobrevivir. Según David Wessels, profesor adjunto de Finanzas de Wharton, los superángeles están simplemente jugando con las cartas que tienen, tal y como hacen los inversores de riesgo. "Las empresas podrían crecer y seguir su propio ritmo, pero esos inversores no recuperarían su dinero para reinvertirlo lo más rápido posible, tal y como hacen. Su objetivo es despegar muy deprisa, y no atravesar las etapas posteriores del negocio".

Dicho esto, añade Wessels: "Si un superángel descubriera realmente el próximo Google, no se saldría de esa empresa. Por lo tanto, es falsa la idea de que un superángel jamás produciría un Google".

Los superángeles fueron de los primeros en invertir en redes sociales como Twitter y Facebook; así como en Mint.com, un servicio financiero personal online. Ellos todavía mantienen su participación en los dos primeros. First Round decidió romper con su política de entrar sólo con capital semilla y participó en sucesivas rondas de inversiones en Mint.com antes de que el servicio fuera adquirido por Intuit, en 2009, por US$ 170 millones, según informaciones de la industria.

"Nuestro negocio no se limita a las salidas rápidas", dice Kopelman. "Teníamos una empresa que vendimos a Google por US$ 100 millones, pero había otras por las que llegaron a ofrecernos mucho más y que decidimos conservarlas". Los superángeles no tienen como objetivo exclusivamente salidas de US$ 25 millones o de US$ 50 millones", dice él, pero como la inversión total de su empresa es relativamente pequeña, "una salida de esas puede generar un retorno positivo para nosotros". Mientras K9, First Round y Ehrenburg, de IBA Venture Partners, invierten, en general, en unas pocas empresas por socio al año, muchas otras invierten a un ritmo extraordinariamente rápido. Senkut invirtió en 60 empresas en cuatro años y medio. Ron Conway, muy conocido por los negocios que hace, creó un fondo de US$ 10 millones a principios de año y fue uno de los primeros inversores de Google, Ask Jeeves y PayPal. Él hace cerca de cuatro inversiones al mes, de acuerdo con TechCrunch. Eso lo deja en relativa desventaja en relación a una empresa del tamaño de Kleiner Perkins, que cuenta con más de 30 socios y un equipo completo de apoyo.

Nuevas tentaciones y desafíos
Los superángeles más dinámicos están literalmente sembrando un campo de start-ups para ver cuál de ellas va a florecer. Los críticos, sin embargo, dicen que esta estrategia puede estar encubriendo una resistencia o falta de habilidad a la hora de diferenciar empresas prometedoras de otras avocadas al fracaso, lo que podría perjudicar a esos inversores cuando las condiciones de mercado no fueran tan favorables como ahora. Para Wessels, sin embargo, la estrategia tiene mucho sentido tal y como está. "El exceso de due dilligence (comprobación minuciosa de los datos) en una empresa por parte de un fondo de gran tamaño se debe a que está invirtiendo en etapas posteriores donde es posible separar vencedores de perdedores. En el caso de empresas muy pequeñas, es mucho mejor hacer algunas propuestas, entrar con algo de capital y de orientación para ver qué sucede, y así identificar en cuál vale la pena invertir más o cuál necesita más orientación.

"Está claro que la estrategia del superángel de hacer una serie de apuestas pequeñas, dando prioridad a las start-ups más prometedoras y vendiendo rápidamente el resto por una cuantía modesta a un grupo específico de compradores adinerados, parece muy apropiado para una industria donde todo es cíclico. Por lo tanto, hay quien se pregunta dónde estarán los superángeles de aquí a cinco años.

Las fusiones y adquisiciones (F&A), crecen y se contraen cíclicamente. En el primer semestre de 2010, había 197 negocios de F&A relacionadas con la TI solamente en la región de la bahía de San Francisco, según datos de 451 Group. La empresa informa que sólo Google compró 43 empresas en los últimos tres años y medio. Yahoo!, eBay y Adobe compraron 18, diez y siete, respectivamente. Para el futuro, los especialistas esperan un declive de esas actividades.

Kopelman resalta que, en vista de la lenta tasa de consumo de la inversión de la mayor parte de las empresas que forman parte de la cartera de los superángeles, las empresas podrían "fácilmente soportar una fase mala de 12 a 18 meses en el mercado de F&A". Esta afirmación puede ser una realidad hoy en día, según los expertos, sin embargo, se prevé un proceso de maduración en el sector de la Web 2.0 al igual que ocurrió con el comercio electrónico, los motores de búsqueda y otros segmentos. A esas alturas, los superángeles tendrán que descubrir otro nicho rentable o cambiar la estrategia de desinversión para centrarse en empresas de costes elevados. Si eso sucede al mismo tiempo que la desaceleración del mercado de F&A, las empresas se verán perjudicadas.

Además de eso, si el mercado de OPV [ofertas públicas de acciones] se calienta, los inversores de riesgo pueden comenzar a materializar un mayor número de éxitos. Las sociedades limitadas, principalmente las institucionales, pueden sentirse decepcionadas con los superángeles y con su colección de éxitos, aunque sean constantes. Doug Collom, vice-rector y profesor de Wharton, es también socio de Wilson Sonsini Goodrich & Rosati de San Francisco. Para él, ese cambio ya está teniendo lugar. "Cuando los inversores de riesgo quieren hacer negocios, pero no hay OPV a la vista, hay que concentrarse en empresas que sean atractivas para los grandes compradores", dice él. Aunque los superángeles tienen ventaja, porque operan con una mayor flexibilidad de precios que los inversores de riesgo, "los mercados de acciones comenzaron a abrirse a las OPV de las empresas de tecnología, lo que se puede considerar un efecto muy positivo. Ahora, los inversores de riesgo pueden prestar atención a las empresas que surten a los grandes mercados sin preocuparse por el hecho de que alimenten, o no, a los grandes compradores".

Mientras tanto, en lo que se refiere a la recaudación de fondos, el éxito trae consigo nuevas tentaciones y desafíos para los superángeles. Sacca destaca que los inversores institucionales han llamado a su puerta y a la de otros superángeles, sin embargo una inversión de US$ 10 millones es demasiado pequeña para los intereses de la mayor parte de ellos. "Ese es el valor que quieren colocar en un fondo", dice él. Algunos superángeles se han hecho demasiado grandes para aceptar a esos nuevos clientes. Muchas empresas parecen querer crecer de tal manera que permanezcan fieles a su nicho, por eso trabajan con valores de capitalización de mercado de US$ 15 a US$ 20 millones por montante básico invertido, lo que es mitad o menos del valor con que trabajan los socios de una empresa de inversión de riesgo de gran tamaño. De forma acumulada, sin embargo, lo que se hay es un volumen mayor de dinero en busca de pequeños negocios en el segmento de capital semilla, dicen los especialistas.

Además, trabajar con clientes institucionales es diferente a trabajar con uno mismo como ángel, o con un círculo familiar o de amigos. "Mis inversiones de mayor éxito siguen siendo las independientes. Están creciendo y quiero que crezcan más y tengan éxito, para que tengan una buena oferta de F&A o una OPV", dice Ehrenberg. "Como ángel, no me importaba, podía ser paciente. Pero en la sociedad limitada, el momento de la salida es esencial; existe el deseo de liquidez. Por lo tanto, tienen todas esas cosas con las cuales yo no tenía que lidiar anteriormente". Debido a los cambios ocurridos en el sector, K9 de Kumar prevé una evolución ineludible. "Todos vamos a entrar en esa espiral. Si yo trabajo con capital institucional [y es lo que pretende hacer en su próximo fondo], seré más grande. Es así cómo se crece, no se puede cambiar el tipo de inversión que haces".

Al mismo tiempo, los analistas dicen que con la maduración del sector de la Web 2.0 y de su estrategia de salida, y a medida que se vuelve cada vez más difícil escoger una empresa vencedora, los superángeles que dependen de sembrar de forma intensiva, y no de recoger éxitos evidentes, pueden tropezar y quedarse por el camino. Otros, sin embargo, con seguridad, van a fijarse en el nicho inicial, van a adaptarse a medida que vaya cambiando y estarán satisfechos con el montante relativamente pequeño de riqueza que va a generar. "Los superángeles tienen una química diferente de la química de los inversores de riesgo", dice Wessel. "No son profesionales de las finanzas; son ex-emprendedores. Si usted es un emprendedor de verdad, lleva en la sangre esa manera de hacer negocios".

Fuente: wharton.universia.net

martes, 19 de octubre de 2010

La importancia del grupo emprendedor

Entrepreneur proviene del latín “prendere”, cuyo significado es “el que se mete y hace la tarea”. Son hombres y mujeres, o equipos emprendedores, cuya pasión y visión común los impulsan a tomar riesgos frente al descubrimiento de oportunidades.

Innovar, experimentar, crear… Emprender es un proceso que involucra el surgimiento de una idea, su conceptualización y la implementación en lo que se llama “Start-Up”, o primera fase del negocio. Luego viene el desarrollo y el crecimiento. Los límites de éste dependen de la visión y ambición del emprendedor (o equipo emprendedor), del tamaño de la oportunidad de negocio y del modelo que se desarrolla para captarla.

Emprender no es una tarea fácil. Para aumentar las probabilidades de éxito de una nueva empresa, existen algunos temas claves que hay que tener en cuenta:

• la oportunidad;
• el modelo de negocio;
• el análisis de los riegos versus las recompensas; y
• el equipo emprendedor.

De los cuatro, el más importante es este último, dado que un emprendimiento es una idea que sólo será realidad si existen un grupo de personas convencidas de que es posible, y ponen toda su energía en conseguirlo.

En el veloz, cambiante y global mundo actual la principal ventaja competitiva radica en la innovación constante y la adaptación a los continuos cambios. Para ser exitoso en este contexto, las personas son la clave. Hoy, el viejo paradigma del emprendedor individual exitoso, famoso hasta hace una década, se volvió obsoleto. Aquel individuo que con una gran idea, mucha dedicación y algo de suerte tenía el éxito asegurado fue perdiendo terreno. Un puñado desarticulado de grandes emprendedores ya no es competitivo para los niveles de eficiencia e innovación constante que exige el mundo actual, que requiere del talento, energía y compromiso de un equipo de personas.

Se trata del emprendedorismo colectivo, es decir, de un grupo de personas que trabajan juntas para enfrentarse al desafío de la competencia global. Este nuevo concepto de entrepreneurship integra las habilidades individuales en un grupo, y la capacidad innovadora resultante es mucho mayor que la suma de todas las capacidades y esfuerzos individuales. Es fundamental que el espíritu, la visión y la actitud del equipo emprendedor se transmitan a cada una de las personas que se suma al equipo. Este conjunto de líderes y sus equipos transforman los riesgos en agregación de valor.

Dado que la innovación debe ser continua e incremental, la misma no es producto de una gran idea sino de la suma y el perfeccionamiento de un conjunto de ideas diseminadas por todos y cada uno de los niveles de la organización. Todos los trabajadores pueden agregar valor descubriendo oportunidades de mejora continua y reinventando a diario la compañía. En este sentido, el desarrollo no es exclusivo de un departamento aislado de la organización, sino que es transversal y permanente en la medida en que se busca nuevas maneras de capturar y construir valor sobre el conocimiento ya acumulado de sus trabajadores.

Este “emprendedorismo colectivo” es clave para construir el camino hacia el éxito de la compañía, objetivo importante para managers y trabajadores. Para los managers, la construcción del camino tiene que ver con atraer personas que compartan valores y actitudes, retener a las mejores, inspirar la creatividad e innovación, y participar a los trabajadores en la creación de valor de la compañía a través de premios tales como profit sharing, gain sharing o performance bonuses para demostrar que el éxito de la compañía es el resultado del esfuerzo de todos. Los managers no son quienes resuelven todos los problemas, sino que son líderes capaces de generar el ambiente propicio para que cada quien identifique y resuelva los problemas específicos.

Para los trabajadores, la construcción del camino tiene que ver con aceptar clasificaciones flexibles de puestos de trabajo, retribuciones con una parte variable relacionadas con los beneficios económicos y las mejoras en productividad, y poder tomar cada vez mayores responsabilidades en el desarrollo de la compañía. Para que esto funcione la estructura de una compañía emprendedora debe ser descentralizada, organizada según criterios de coordinación y comunicación en vez de estar basada en criterios de control y mando como en las obsoletas estructuras verticales.

Lo importante es realmente aprehender la idea de que el emprendedor dentro de la compañía no es sólo el equipo emprendedor, sino todas las personas que la componen. Finalmente, todas estas personas terminan siendo de alguna manera socias en el futuro. La distinción entre “emprendedores” y “trabajadores” se hace difusa: cada persona de la empresa participa en su evolución y está comprometida con su éxito. El gran desafío es mantener este espíritu en las diferentes fases de crecimiento de la compañía.

Está claro que al final son las personas las que producen los cambios.

Marcelo Berenstein
Grandes Pymes

martes, 12 de octubre de 2010

Mapas estrátegicos, ¿cómo marcar el rumbo en una PyME?

Un mapa estratégico es una representación visual de la estrategia de una organización y permite expresar claramente la visión del líder sobre los distintos objetivos a alcanzar. ¿Cómo implementarlo en una PyME?

"Gestionar el crecimiento", "aprovechar el viento de cola" y "crisis es oportunidad" son expresiones muy frecuentes en el mundo de las pequeñas y medianas empresas.

Pero las certezas se desvanecen cuando nos preguntamos cómo hacerlo. ¿Cómo aprovechar las oportunidades de crecimiento? ¿Cómo quedar mejor parados tras una crisis?

No existe una respuesta única a estos interrogantes. Sin embargo, es posible presentar algunas líneas de reflexión para orientarnos.

En general, el líder de una PyME tiene definida una estrategia. Es decir, conoce el rumbo que desea para el negocio y las medidas a tomar para concretar su visión.

No obstante, esta visión suele no ser conocida en su totalidad por su equipo de gestión. Esto ralentiza la toma de decisiones en la organización y genera frustración en los responsables de cada área.

Y, en momentos de fuerte crecimiento o en las turbulencias de una crisis, el tiempo es oro. Una decisión tomada demasiado tarde puede significar la diferencia entre el éxito y el fracaso.

El Balanced Scorecard puede ofrecernos un método para resolver esta problemática que afecta a tantas pequeñas y medianas empresas.

Un mapa estratégico es una representación visual de la estrategia de una organización y permite expresar claramente la visión del líder sobre los distintos objetivos a alcanzar a nivel financiero, de mercado, de procesos internos, de capital humano, y de información.

En la confección de mapa, es aconsejable que participe todo el equipo de dirección, a fin de generar consenso en torno a la estrategia y comprometer a todos en su ejecución.

El mapa estratégico como herramienta de toma de decisiones
El mapa estratégico permite reducir la incertidumbre en momentos en que hay que tomar decisiones rápidas.

En efecto, el mapa estratégico contiene las prioridades de la compañía delineadas, consensuadas y conocidas por todos. De esta forma, se evita el riesgo de que el líder se convierta en un "cuello de botella", y que todas las decisiones deban pasar por él, convirtiéndose en un obstáculo para el crecimiento.

El mapa estratégico como explicación de la creación de valor
El mapa estratégico permite explicar claramente la forma en que nuestra organización genera valor, es decir, cuál es la propuesta de valor a nuestros clientes que nos diferencia de la competencia.

El mapa estratégico como herramienta de comunicación
Al explicitar la estrategia de la compañía, el mapa estratégico permite que todos los colaboradores la conozcan, reforzando la motivación para la ejecución.

El mapa estratégico como herramienta de gestión de la estrategia
Contar con un mapa estratégico nos permitirá gestionar activamente nuestra estrategia, a través de indicadores que vayan monitoreando y brindándonos información sobre los avances logrados, pudiendo aprender cómo se interrelacionan los distintos objetivos estratégicos.

La estrategia no se mueve sola. Hay que impulsarla a través de proyectos de intervención o iniciativas que movilicen a la organización y nos lleven en el camino deseado. Y el mapa estratégico es una herramienta muy valiosa para lograrlo.

¿Qué puede hacer una PyME?
Hasta aquí, hemos presentado las ventajas de contar con un mapa estratégico. Quizá todo este trabajo parezca imposible en una PyME, donde los recursos son escasos y todo se hace "a pulmón".

Pero, justamente por esto es que la PyME es la primera interesada en implementarlo. Disponer de esta herramienta de gestión de la estrategia permitirá enfocar los recursos escasos en los temas prioritarios, reconocer más rápidamente amenazas y oportunidades, y tomar las medidas adecuadas para sacar provecho de la situación.

Existen múltiples casos de éxito de implementación de esta herramienta de gestión en pequeñas y medianas organizaciones.

Sparkling, el proveedor de dispensers de agua, es un ejemplo de empresa que utiliza este sistema para definir su estrategia y comunicarla hasta los empleados que entregan los botellones de agua a domicilio.

Algunas premisas para un proceso de gestión de la estrategia en una PyME
Para maximizar las probabilidades de éxito, una pequeña organización debe tener en cuenta las siguientes pautas, a la hora de implementar este sistema de gestión de la estrategia:

El líder de la organización debe liderar el proceso: Todos los empleados deben percibir que el tema ocupa un lugar central en la agenda del líder.

Mantener simple el diseño: De nada sirve sofisticar el mapa y sus indicadores si se carga a la organización con una herramienta que conlleve más esfuerzos que beneficios.

Focalizar a la organización en pocas iniciativas estratégicas: Como dice el refrán, "quien mucho abarca, poco aprieta".

Contar con un equipo de líderes consolidado: No es necesario que sea numeroso, pero sí que cada uno entienda el rol que desempeña y su contribución al grupo.

Explicar a todos el rumbo elegido: Es fundamental, una vez definida la estrategia en el equipo de líderes, explicar a todos los empleados lo que se espera de ellos, ya que serán ellos quienes ejecuten el plan diseñado por los líderes.

Comunicar avances y logros: Para mantener a todos motivados y "subidos al tren", es importante que las comunicaciones sobre la marcha de la estrategia sean asiduas. De nada vale comunicar una vez al año para motivar a nuestra gente.

Dos veleros navegan tranquilamente por un río. Uno, con destino incierto. El otro, con una hoja de ruta claramente definida. De pronto, se desata una tormenta. ¿En cuál de los veleros preferiríamos estar?

Maximiliano Kunath
Gerente de Consultoría, tantum argentina
Fuente: Materiabiz

martes, 5 de octubre de 2010

Capital Social: Clave de éxito para emprender


El Capital no es solo dinero, hay otros tipos de Capital que necesita el emprendedor en todas las etapas de desarrollo de su emprendimiento, desde la gestación hasta el crecimiento y la consolidación, y es el Capital Social

Seguramente habrán escuchado la frase “Juan es muy sociable”, o “que bien se maneja socialmente”, bien, de esto se trata de alguna manera. Pero aplicado más que a reglas básicas de cortesía y urbanidad, a la posibilidad de potenciar nuestros emprendimientos, otorgando a su vez beneficios a nuestra contraparte. Si bien puede adquirirse día a día, sin mayores costos que afrontar, es necesario “recaudarlo” siempre, ya que sus dividendos pueden ser extraordinarios, inesperados y sin exigencias de retorno inmediato.

No lo confundamos con otros significados contables o macroeconómicos, aquí nos referimos al Capital Social Emprendedor, basado en las redes de contactos personales y grupales que sepamos conseguir.

Ampliar nuestra red de contactos o network está directamente relacionado con la consecución de nuestros objetivos. Dicha red se convierte en nuestra Red Social (virtual o presencial) , que debe gestionarse adecuadamente. Ampliar el círculo de conocidos, fortalecer nuestras relaciones y ayudar a los demás para ser ayudado contribuirá a nuestro éxito. En inglés se habla de “Know Who” (a quienes conocemos), en analogía al “Know How” (Que conocemos)

Que es el Capital Social
Según define WIKIPEDIA, el Capital Social es la variable que mide la colaboración social entre los diferentes grupos de un colectivo humano, y el uso individual de las oportunidades surgidas a partir de ello, a partir de tres fuentes principales:
  • La confianza mutua
  • Las normas efectivas
  • Las Redes sociales.
Por lo tanto, se refiere a la interacción humana, y las oportunidades que se generan a partir de ellas, donde es necesario contar con herramientas, habilidades y actitudes que reconozcan el valor de las mismas y las “reglas” con las que se rigen.

El capital social también puede definirse como el conjunto de recursos disponibles para nosotros a través de nuestras redes de contactos personales y profesionales. La palabra capital aporta el significado valor y la palabra social atribuye ese valor no a nosotros, sino a nuestra red de contactos.

Pensemos que tiene más valor para un emprendedor: $100.000 de inversión inicial o lograr a través de nuestra Red de contactos entrevistas con Canales de venta de nuestros productos o servicios, que representarán dentro de un año una facturación de $ 1 milllón

El capital social también mide la sociabilidad de un conjunto humano y aquellos aspectos que permiten que prospere la colaboración y el uso, por parte de los actores individuales, de las oportunidades que surgen en estas relaciones sociales.

Las personas con una gran capacidad de conexión generan valor y son muy valoradas a nivel profesional y de negocios. Y gozan de retornos crecientes, “la riqueza social atrae a la riqueza social”: una persona que tiene un gran número de buenos contactos atrae al resto del grupo que quiere estar conectado con ella y con ellos viene otros contactos valiosos.

Factores importantes a considerar (y aprender a manejar)
Para el logro de Capital Social, no basta solamente contar con tarjetas personales, una linda sonrisa y facilidad de diálogo, se necesita eso, pero también mucho más, construirlas, y sobre todo, gestionarlas:

Algunos tips:
Plan de acción para generar networking, construir y gestionar Capital Social:
  • Generá un Diagrama de relaciones: amigos, familia, relaciones profesionales, colegas de trabajo, amigos, colegas y amigos de amigos, etc.
  • Listá las personas a las que les interese o necesiten algo que estés haciendo o tengas la posibilidad de hacer: invitar a una charla, enviar un artículo que le interese, presentarle algún contacto, etc-
Contactalos!
De esta forma podés ser objeto de reciprocidad y construir relaciones que podrás utilizar en otro momento.
  • Valorar el trabajo colaborativo y las reglas de intercambio: Muchas relaciones sociales, y casi todas las vinculadas al mundo de los negocios, se construyen como un ida y vuelta, donde puedo pedir en la medida que también estoy dispuesto a dar. Y para dar algo de valor, debo tener algo que la otra parte necesita. Aunque suene antipático, es la realidad y más allá de la simpatía personal, casi nadie está dispuesto a colaborar si no ve un beneficio (actual o diferido) para si en dicha colaboración.
  • Posicionarnos adecuadamente en nuestra Redes Sociales: Debemos hacer conocer nuestras capacidades y posibilidades de intercambio, en otras palabras, comunicar que tenemos de valioso para otros, sea en nuestro know how o en nuestras propias redes de contactos.
  • Generar credibilidad: Esto lo podemos logra respaldando eso que estamos comunicando que somos y hacemos, y luego actuando en forma confiable, acorde a esas expectativas. La credibilidad se genera con el tiempo, pero puede perderse en un instante (máxime con la “viralidad” en que la información puede expandirse)
  • Mantenernos activos: Aparecer con cierta frecuencia, intercambiar, comunicar novedades, etc. nos hace visibles y permite actualizar nuestro estado. Sea en forma virtual, como presencial, debemos “estar” haciendo networking, sumando contactos, refrescando otros, fidelizando los más relevantes.
  • Capacitarnos y mejorar nuestras habilidades de comunicación: Es clave poder comunicarnos efectivamente, y esto implica varias facetas: Redactar en forma correcta, tener poder de síntesis, mantener “reglas de cortesía online” (ej. responder emails, práctica que mucha gente no hace, dejando una pésima imagen); capacidad de verbalmente exponer nuestro negocio rápidamente y de hacerlo también ante una audiencia mayor; inteligencia emocional e interpersonal para captar que necesita el otro y en que momento abordar la temática, etc.
  • Capacitarnos y mejorar nuestras habilidades de Negociación: Al igual que en la comunicación, es clave saber negociar con nuestros contactos, siempre sobre la base “ganar-ganar”.
  • Compartir nuestros contactos: Cuidando siempre la forma en que lo hagamos, y evaluando las partes a las que conectaremos. Este tipo de conexiones son muy valoradas, pero si las manejamos más, corremos el riesgo de “incinerarnos”
Hay muchas más formas de incrementar tu Capital Social, es un proceso que nunca debe terminar y durante el cuál podrás disfrutar y aprender de mucha gente interesante. Vale la pena!

Autor: Víctor Kertesz
Licenciado en Administración y Contador Público (UBA)
Es coautor de los libros “Marketing” (2007), “Manual para empresas familiares” (2005) y “Liderazgo Transaccional” (1994). Ha ganado en 2 ocasiones el Premio Manuel Belgrano´, otorgado por el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CPCECABA).

Fuente: Emprendedores News


martes, 28 de septiembre de 2010

10 Consejos para los Emprendedores con escasos recursos económicos


1. Establece metas realistas
El primer paso que cada empresaria/o debe dar para la puesta en marcha de una nueva actividad es determinar correctamente el alcance y tamaño de su negocio.

Muchos empresarias/os simplemente se lanzan a la idea de iniciar un negocio, sin comprender lo que la empresa realmente implica: las necesidades financieras, los conocimientos de gestión, y conocimientos tecnológicos, necesidades de recursos humanos. Finalmente se quedan cortos con lo que realmente puede hacer.
Estudia nuevamente la empresa que tienes en mente y determina si está dentro de un rango que realizable y deseable.

2. Planifica tus gastos correctamente
Muchos empresarios inician un negocio sin la menor idea de los costos. O bien sobreestiman el costo, o peor, subestiman los recursos financieros necesarios para capitalizar correctamente el negocio. Esto es especialmente evidente en la preparación de las proyecciones financieras en el plan de negocios.

Algunos empresarios preparar las proyecciones financieras con números que no cuadran con otras secciones del plan de negocios (ej. La sección de Comercialización habla de las campañas televisivas con un presupuesto de $200!). Algunos ni siquiera incluyen una lista de suposiciones para explicar en que basaron sus números. De la nada sienten que sus negocios pueden crecer un 20% el primer año y un 40% el segundo, sin explicar como se puede conseguir ese crecimiento.

3. Financia tu negocio con inteligencia
Para muchos emprendedores no hay una sola fuente que le permita financiar toda la operación. El dinero proveniente de una fuente puede ser suficiente para adquirir las materias primas pero aún así necesitará dinero como capital de trabajo.

Los emprendedores necesitan ver el financiamiento como la suma de las partes de su negocio: lo que tu financias son los activos individuales que necesitas para el negocio.

Te debe preguntar siempre: ¿Cuál es la mejor forma de financiar este activo usando la menor cantidad de dólares por adelantado? La fuente ideal de financiamiento es la que provee el mayor período de pago, al menor interés, requiere poca o ninguna garantía y no demanda responsabilidad personal. Ay, casi un cuento de hadas. Lo siguiente mejor opción es elegir, dadas sus prioridades, lo que tiene más sentido para tí y tu negocio.

4. Pon tu dinero donde fructifique
Los emprendedores de escasos recursos tienen una cosa en común: les falta dinero y a menudo luchan por conseguir capital para su empresa. El capital para la puesta en marcha de una empresa va a una de estas inversiones: "activos fijos" (muebles, mobiliario y equipo), o "activos de trabajo" (inventario y capital de trabajo).

A pesar de la falta de capital, muchos emprendedores invierten la mayor parte del dinero en equipamiento elegante y unas oficinas muy chick (gastos que una empresa que está luchando por surgir puede muy bien obviar). Este es un error común en la toma de decisiones. Los emprendedores exitosos invierten todo lo posible en capital de trabajo –lo que trae cash y ventas- y lo menos posible en activos fijos.

5. ¿Es este el momento adecuado?
El momento oportuno puede ser clave para el éxito de una puesta en marcha. Hay un tiempo apropiado y un mal momento para abrir un negocio, especialmente si tu negocio es de naturaleza cíclica o de localización estacional. La apertura de un espacio minorista en tu shopping mall favorito, o tu propia conveniencia no deberían ser sus razones para iniciar un negocio. Por el contrario, debes planificar detenidamente los meses en que la cresta de la demanda de su producto termina.

6. Controla el efectivo
Dicen que el cash-flow o flujo de fondos es el alma de una pequeña empresa. Y con razón. Tu negocio sobrevivirá sólo mientras tenga dinero en efectivo para pagar sus obligaciones financieras. Con un capital limitado, el flujo de efectivo controla cada decisión en empresas con pocos recursos, y puede ser la única manera de navegar durante su fase inicial.

Una regla clave para emprendedores: sólo cuando tienes suficiente dinero en efectivo puedes siquiera empezar a pensar de los beneficios. Muchas empresas fallan no porque no tienen suficiente capital, sino porque fracasan en planificar apropiadamente la etapa de escasez de capital.

7. Impulsa las ventas
Hacer crecer las ventas depende de varios factores: la naturaleza de la empresa, su ubicación, el nivel de la competencia, y la intensidad de la comercialización y promoción que lleve adelante.

El objetivo de todo emprendedor escaso de recursos debe ser conseguir ventas inmediatamente. Si tienes un préstamo bancario o te financiaste con tu tarjeta de crédito, por ejemplo, tus acreedores no te permiten retrasar sus pagos simplemente porque tú estas todavía en el proceso de desarrollar sus ventas. Quieren cobrar ¡ahora!

Por lo tanto necesitas impulsar la comercialización de tu empresa, quizás con unos volantes esta semana, un pequeño anuncio en el diario local la siguiente, o mediante el envío de gacetillas y contribuir con artículos en revistas, blogs o sites que tu mercado objetivo visita.

La regla clave es dedicar al menos 2 horas diarias al marketing. Conoce los pasos que dará antes y después de abrir para maximizar las ventas y ayudar al negocio a apurar el crecimiento de las ventas.

8. Equilibra tus objetivos de ventas y beneficios
Las ventas y los beneficios no siempre van de la mano. Algunos emprendedores están dispuestos a recortar sus beneficios en un esfuerzo por mejorar las ventas. A menudo el volumen por si sólo no será capaz de compensar la pérdida de beneficios. Trata de mantener la ganancia bruta al menos igual que los promedios de esa actividad. Esfuézate por encontrar el equilibrio entre una sólida política de capturar ventas sin sacrificar los márgenes de beneficio necesarios.

9. Se “delgada/o y miserable”
Una empresa que lucha por arrancar no necesita pesos muertos. Mantiene tus costos fijos bajos y gasta sólo en las cosas que pueden contribuir a mejorar sustancialmente lo esencial (o sea, invierte, no gastes...). Si todavía puedes funcionar adecuadamente desde la oficina que tienes en tu casa, no hay necesidad de arrendar un espacio de oficinas en la zona céntrica. Evita contratar a un empleado permanente si todavía puede arreglarse con personal temporal y estacional.

Cada dólar gastado debe estar directamente vinculado con los ingresos: gasta un níquel (5 ctvs) sólo cuando usted esté segura/o que obtendrá 10 centavos de retorno

10. Domina las herramientas financieras
Como propietaria/o de su negocio, tú eres responsable por la vida y crecimiento de tu empresa. Eso implica saber, no sólo el marketing o los aspectos productivos de su negocio, sino las herramientas financieras que necesitas para gerenciar tu empresa efectivamente. La comprensión de las finanzas de tu negocio te dará el control de su dirección.

Fuente: empresa-iecs.blogspot.com
imagen: Web

martes, 21 de septiembre de 2010

El duro camino del emprendedor... pues eso sólo es el principio

Todos los días se publican post, y artículos en prensa, haciendo referencia al duro camino que debe afrontar el emprendedor, las dificultades de empezar un negocio, la búsqueda de financiación, el plan de empresa, etc. Como si el trabajo del emprendedor fuera sólo poner el negocio a funcionar y no hubiera nada después.

En la inmensa mayoría de los casos, se trata de dar una serie de consejos o de pautas de actuación para ayudar al emprendedor en su árdua tarea de empezar un negocio. Sin embargo lo que no se suele comentar es que ese es sólo el primer paso y que luego viene lo más difícil, porque la mayor dificultad no es montar un negocio, sino sostenerlo.

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La tarea de transformar una idea en un negocio es, efectivamente, complicada. Planificación, proyecciones económicas, estudios de mercado, captación de fondos, inversiones en equipamiento, buscar proveedores, colaboradores, en algunos casos, trabajadores. El emprendedor ha de cubrir todos esos frentes y todo ello con un alto grado de incertidumbre ya que no tienen referencias reales que confirmen que las decisiones tomadas son las adecuadas.

Sin embargo, y a pesar del alto grado de dificultad que entrañan todas estas tareas, lo realmente complicado llega cuando todo se pone en marcha. Cuando las proyecciones económicas empiezan a fallar, cuando el mercado no se comporta como habíamos estimado y las ventas son mucho más bajas, cuando el equipo no funciona como habíamos pensado o los proveedores no cumplen con lo acordado.

A veces, el problema no es porque la situación sea negativa, sino todo lo contrario. Podemos habernos quedado cortos en la planificación de las ventas y que el negocio funcioné mejor de lo previsto, eso nos puede obligar a tener que plantearnos contratar más personal, comprar más maquinaria para producir más, renegociar las condiciones con los proveedores al aumentar el volumen de compras, etc.

La cuestión es que, si bien, durante la fase de emprendimiento la toma de decisiones se puede hacer a otro ritmo y ese ritmp lo marcamos nosotros, cuando la empresa está funcionando, muchas de esas decisiones debemos tomarlas en tiempo real, no hay margen a aplazamientos, porque la empresa no puede pararse.

Muchas veces, el emprendedor echa “toda la carne en el asador” para poner la empresa en funcionamiento y, sin embargo, no es consciente de lo que viene luego y se relaja pensando que ya está todo hecho y que las previsiones se van a transformar, como por arte de magia, en realidades, en beneficios.

Es muy posible que el corto recorrido de las pymes tenga mucho que ver con esta mentalidad. El pensar que la meta del emprendedor es crear su propia empresa y no darse cuenta de que después de eso comienza, verdaderamente, el camino, y que si hasta ese momento las cosas son difíciles, después lo serán más.

http://www.pymesyautonomos.com

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Los diez mandamientos de actividades emprendedoras

Cuando Guy Kawasaki habla sobre innovación en los negocios, como hizo recientemente en la conferencia de tecnología de la Universidad de Pensilvania, lo hace desde la perspectiva de quien cuenta con más de 25 años de experiencia en el asunto—un historial que el afable inversor y emprendedor dice estar lleno de altos y bajos.

Después de estudiar psicología en Stanford y de concluir un MBA en la Universidad de California (UCLA), Kawasaki, nacido en Hawai, se convirtió en el segundo “evangelista” de software de Apple Computer. Su trabajo, de 1983 a 1987, consistía en convencer a las personas para que crearan software para el Macintosh. Él recuerda con cariño a sus compañeros en Apple como individuos visionarios, motivados y probablemente “la mayor colección de excéntricos en la historia de California, aunque el récord lo rompió posteriormente Google”.

Después de salir de Apple, Kawasaki abrió empresas propias, además de hacerse consultor, autor y capitalista de riesgo. Escribió, entre otros: The Macintosh way, Rules for revolutionaries, Selling the dream y, más recientemente, Reality Check. Hoy, con 54 años, Kawasaki oye con frecuencia los planes que le presentan los fundadores de nuevas empresas de tecnología en las oficinas de su compañía de capital riesgo, Garage Technology Ventures. En la cartera de Garage hay tecnologías específicas para la subcontratación de actividades de logística y para el sector de la energía renovable, entre otras, aunque Kawasaki admite que la empresa no ha dado todavía con un gran descubrimiento que la haga despegar, un Apple o un Google propios. En 2008, el empresario lanzó Alltop, una web libre que usa el RSS para agregar, por materias, las últimas novedades de miles de webs y blogs. Su blog, “Cómo cambiar el mundo” [How to Change the World], es una de las webs de estrategia más visitadas.

En la Universidad de Pensilvania, Kawasaki habló durante el congreso que marcó el 20 aniversario del programa Master Ejecutivo en Gestión de Tecnología (EMTM), ofrecido por el departamento de ingeniería de la universidad en asociación con Wharton. La charla titulada “El arte de la innovación” consistió en un manifiesto de diez puntos sobre cómo producir algo de valor para el cliente. Durante la charla, Kawasaki dio ejemplos divertidos y reveladores sobre servicios como la entrega de hielo (actualmente obsoleto) y sandalias de playa que se pueden usar para abrir botellas de cerveza.

A continuación un resumen de los “Diez mandamientos” de Kawasaki:

1. Ofrezca sentido, y no dinero.
“Como capitalistas de riesgo”, dijo Kawasaki, “lidiamos con muchas empresas que, por norma, nos dicen aquello que creen que nos gustaría oír: cómo ganar dinero. Según mi experiencia, la mayor parte de las empresas fundadas sobre el concepto de ganar dinero suelen fallar. Atraen el tipo equivocado de socio y de empleado”. En lugar de eso, dice, el emprendedor debe preocuparse por hacer que su producto o servicio signifique algo más que la suma de sus componentes, y del dinero que podrá ganar. Kawasaki llamó la atención sobre las zapatillas aeróbicas de Nike dirigidas al público femenino, y cómo la empresa hizo de ellas algo más que sólo “dos piezas de algodón, cuero y goma producidas en condiciones relativamente sospechosas en Extremo Oriente”. Con una publicidad inteligente en que mostraba cómo las mujeres siempre han sido juzgadas y evaluadas, Nike “cogió un conjunto de materias primas de 2,50 dólares y lo transformó en símbolo de eficiencia, poder y liberación. La empresa produce sentido por medio de zapatos. Las grandes empresas son generadoras de sentido”. No hay duda de que Apple hizo eso con el Mac, con el iPhone y otros aparatos.

2. Trabaje con un mantra, y no con una misión.
Declaraciones insípidas y genéricas sobre la misión de la empresa —“ofrecer productos y servicios de calidad superior para nuestros clientes y para la comunidad por medio de liderazgo innovador y asociaciones”— son buenas sólo para el consultor contratado para desarrollarlas, dijo Kawasaki. En vez de eso, opte por la concisión y defínase a sí mismo por lo que usted quiere significar para el cliente. Nike ofrece un “desempeño atlético auténtico”; FedEx promete “paz de espíritu”. Para que todos, dentro y fuera de la empresa, estén unidos en torno al mismo propósito, explíqueles la razón de ser de la empresa y de qué manera ella atiende a las necesidades y deseos de los clientes.

3. Sáltese las curvas. Innovar es más difícil que simplemente estar un poco por delante de la competencia en la misma curva.
“Si su empresa fabrica impresoras de margarita, el próximo paso no es la introducción del tipo Helvética en un tamaño de fuente diferente. Su objetivo debe ser ‘saltar’ hacia la producción de impresoras láser”, dijo Kawasaki. Eso es más fácil de hacer en algunas empresas que en otras. El empresario dijo que en los tiempos anteriores a la refrigeración, la industria del hielo estaba formada por gente que cogía hielo en las regiones de clima frío usando caballos, trineos y sierras para ‘cosechar’ el hielo durante los meses de invierno. En 1900, un total de 4.536 toneladas de hielo se produjeron de ese modo. Después vino la era del ‘Hielo 2.0’: surgieron fábricas que producían hielo en cualquier lugar. El ‘hombre del hielo’ entregaba el producto en establecimientos comerciales y en las casas. Por fin, llegamos a la era del ‘Hielo 3.0’: la nevera casera.

Está claro que ninguna de aquellas personas que cosechaban hielo se metió en el negocio de la producción en fábricas, lo mismo que ninguna de las fábricas se introdujo en la industria de neveras. Esto se explica por el hecho de que “la mayor parte de las empresas se define por aquello que hace”, dijo Kawasaki, “y no por el ‘beneficio que genera para el cliente’. La verdadera innovación aparece siempre que nos saltamos las curvas, y no cuando nos esforzamos por mejorar un 10% o un 15%”.

4. Trabaje con diseños exclusivos.
Introduzca características que no se queden en lo trivial. Kawasaki citó una de las ideas que considera más innovadoras: las sandalias Fanning Reef, que traen un abridor de botellas incorporado a la suela. Hay diseños igualmente inteligentes, como el de la linterna BF-104 de Panasonic, que puede usar pilas de tres tamaños diferentes. De ese modo, las personas no tendrán dificultad en escoger una pila entre los diferentes tamaños que suelen tener en casa. Hay diseños que son completos, porque no se limitan solo al producto: ofrecen también soporte y servicio. La elegancia también es fundamental, dice Kawasaki. “Toda empresa debería tener un CTO: Chief Taste Officer, o director de gusto’”, dijo. Tampoco puede faltar la emoción. “Buenos productos producen emociones fuertes: piense en la Harley Davidson, el Macintosh”.

5. No se preocupe en crear un producto perfecto.
Esto no significa hacer un producto malo, sino que “la innovación puede contener elementos no muy buenos”, dijo Kawasaki. Twitter tiene un montón de fallos, pero está cambiando el hábito de las personas. El primer Mac tenía muchas cosas que había que mejorar, pero estableció cómo sería el futuro de la computación personal, y no necesitó esperar mucho por eso.

6. Polarice a las personas.
Siempre que usted intente serlo todo para todo tipo de personas acaba cayendo en la mediocridad, dijo Kawasaki. El Scion xB de Toyota, con su estilo “cuadrado”, puede parecer feo para algunas personas, pero para los fans es sensacional. El TiVo tiene éxito, a pesar de volver loca de rabia a la industria de la publicidad.

7. No impida que broten las flores.
Parafraseando a Mao, Kawasaki dijo que no sabemos dónde va a surgir una flor, así que simplemente debemos permitir que brote. Las innovaciones pueden atraer a clientes inesperados e imprevistos. Fue lo que sucedió con la crema para la piel “Skin-so-Soft” de Avon, que acabó siendo un éxito como repelente de mosquitos. La regla número 1, dijo Kawasaki, consiste en “conseguir el dinero. Regla número 2: descubrir quien está comprando su producto. Pregunte a esas personas por qué lo están comprando y déles otras razones para comprarlo. Eso es mucho más fácil que preguntar a las personas por qué no están interesadas y, a continuación, intentar cambiar su manera de pensar”.

8. Renuévese, renuévese siempre.
Nunca deje de mejorar su producto o servicio. Oiga las ideas de los consumidores. No es fácil, dice Kawasaki, porque el innovador o el emprendedor siempre deben ignorar el consejo de los negativos y de los necios, para quien casi todo es imposible. Una vez hecho esto, cuando el producto llega a las manos del consumidor, ha llegado el momento de comenzar a recibir feedback.

9. Escoja su nicho. Encuentre su lugar.
A continuación, presentó un gráfico simple de coordenadas X y Y con los cuatro cuadrantes donde se veían las variables “Exclusividad” y “Valor”. Un producto o servicio no necesita ser exclusivo para generar valor. Así fue, dijo, cómo Dell obtuvo cuota de mercado vendiendo ordenadores. En el cuadrante izquierdo inferior del gráfico Kawasaki colocó varias puntocom surgidas a finales de los años 90 sin nada de especial unas en relación con las otras. Eran empresas de bajo valor y sin inspiración. Ya en el cuadrante superior derecho estaban los productos y servicios exclusivos y de alto valor. Allí estaban la empresa online de servicios de entradas de cine Fandango y la compañía de tarjetas Clear, que puede agilizar el paso de los usuarios por la seguridad de los aeropuertos. “La parte superior derecha es la parte más codiciada del mercado”, dijo. “Allí hay producción de sentido. También es allí donde se gana dinero, se hace historia”.

10. Siga la regla del 10-20-30 siempre que esté intentando convencer a un capitalista de riesgo.
En otras palabras, no use más de 10 diapositivas de PowerPoint, restrinja su discurso a 20 minutos y utilice una fuente de tamaño 30 en su presentación (para mantenerla simple). El objetivo de ese tipo de presentación no es volver a casa con un cheque en la mano, dijo, sino evitar “ser descartado”.

Kawasaki añadió un ítem más para todos los innovadores —y un mea culpa. “No deje que los necios lo desanimen”, dijo citando a continuación una serie de declaraciones bien conocidas de gente que suele mirar con desconfianza a las nuevas tecnologías. Fue el caso del presidente de IBM, Thomas Watson, que en 1943 estimó el tamaño total de usuarios del mercado de ordenadores en “cinco, tal vez” (historiadores del sector cuestionan la autenticidad de esa cita no comprobada). Citó también la falta de visión de Western Union, que no vio ninguna utilidad para el teléfono. Esas empresas se dejaron engañar por aquello que ya habían producido y no se pararon a pensar en lo que serían capaces de producir en el futuro. Debemos ignorarlas, dijo Kawasaki. Sin embargo, él admitió que fue un necio una vez. A mediados de los años 90, le llamaron para una entrevista en Yahoo para el cargo de consejero delegado. La declinó. Él creía que Internet era otra actividad más para el módem del ordenador. Encontrar cosas en la Web tenía un valor limitado, en su opinión. “Según mis cálculos, esa decisión me costó 2.000 millones de dólares”.

Fuente: Warthon Universia