miércoles, 18 de julio de 2012

Estimulando tu espíritu emprendedor…



¿Nunca les pasó que de tener una idea en la cabeza y no saber como expresarla? A mi me sucede a menudo, especialmente cuando me siento a escribir esta columna.

Acumulo y anoto ideas para compartir pero al momento de bajarlas al teclado se me dificulta.

Para esta editorial estuve toda la semana pensando en temas que estimulen, impulsen, renueven el espíritu emprendedor. Me senté frente a la computadora y no encontraba ninguna forma atractiva de contarlos…. hasta que encontré que alguien escribió antes algo parecido y mucho mejor de lo que yo podría hacerlo.

Esa persona es el empresario e inversor español Alejandro Suárez Sánchez Ocaña que escribió un artículo llamado “10 ideas para estimular tu espíritu emprendedor” y me tomo el atrevimiento de compartirlo:

1. Cree en ti mismo
Es de Perogrullo, pero resulta fundamental: una persona sin autoconfianza no puede desarrollarse como emprendedora. Toda actividad que deba partir de ti empieza dentro de ti mismo.

2. Desarrolla un espíritu crítico, empezando por ti mismo
La apatía y el conformismo con uno mismo y con lo establecido son dos de los principales enemigos del emprendimiento.

3. Ambiciona objetivos, valora periódicamente si tus acciones te están acercando o alejando de ellos
Cualquier objetivo que te propongas y te motive lo suficiente es válido, plenamente válido. Visiónalos y acércate cada día más a ellos.

4. Que tus ambiciones sean reales y lógicas
 Puede ser muy grandilocuente querer conquistar el mundo o abolir el hambre en África, pero sé razonable con tu micro mundo. Si lo que te motiva a corto plazo es comprarte una pantalla de plasma para ver la Eurocopa, trabaja por ello. Está bien tener grandes motivaciones con mayúsculas, pero también pequeños objetivos a corto plazo. Son estos últimos los que te harán moverte en el día a día y mejorar de forma tangible.

5. Desarrolla tus cualidades creativas
El mayor enemigo de la creatividad es uno mismo y sus “certezas de que no es creativo”. Todos podemos ser creativos en mayor o menor medida. Picasso decía que solo hay que fijarse en los niños. Todos ellos son personas creativas. A medida que nos vamos haciendo mayores, la gran mayoría de nosotros -por vergüenza, miedo o asemejarnos a la masa- va perdiendo esa creatividad. Recupera e incentiva la tuya.

6. Sé rápido
Es importante. No hay que ser un kamikaze, pero sí lo razonablemente rápidos en nuestras iniciativas. Si bien es cierto que algunas personas, por llegar demasiado rápido, se adelantan a su tiempo y pueden resultar incomprendidas, no es menos cierto que el mundo está lleno de personas que creyeron tener una idea y que, de tanto amasarla en su mente, vieron cómo fueron otras las que la pusieron en marcha.

7. Elije ser piloto
Las personas se pueden dividir en dos grupos: los que pilotan su existencia y los que se dejan flotar y acompañan a la gran masa según sople el viento. El éxito personal y profesional del segundo gran grupo está generalmente muy encorsetado, o se debe al azar. Es importante pilotar tu propio destino. Toma tus propias decisiones, aunque te separen del camino de las personas más cercanas.

8. Valora a los demás de la misma forma en la que te gustaría ser valorado
La “meritocracia” es el ecosistema lógico más beneficioso para cualquier persona con espíritu emprendedor. Siguiendo la misma regla de tres, para ser tratado así, deberías valorar del mismo modo a los de que tienes alrededor, esto es, en relación a sus méritos adquiridos.

9. No digo que olvides la teoría, pero… 
Para un emprendedor, hasta metiendo la pata, la clave está en la práctica. En el ecosistema emprendedor hay personas que leen todos los libros, acuden a todos los actos, leen todas las revistas y están dando vueltas al mismo círculo una y otra vez. Sin embargo, dan la sensación de que nunca lograrán hacer nada o, peor aún, que lo harán cuando sea demasiado tarde.

10. Sé práctico
Dentro de la analítica del cerebro izquierdo debería estar grabado a sangre y fuego que nuestro esfuerzo debe tener siempre una recompensa y un motivo.  El emprendedor se esfuerza y es creativo, pero todo ello debe estar marcado por un alto carácter práctico que le haga vislumbrar un objetivo que le mantenga motivado. Generalmente lo más rápido es lo más sencillo, y lo más sencillo es ser práctico.

Marcelo Berenstein 
Periodista - Director de Emprendedores.News
Autor del libro “201 Mensajes para Emprender y Liderar”
Conferencista internacional sobre entrepreneurship, liderazgo y motivación

Imagen: Web